
El atentado se investiga como un ataque islamista
Lo que debía ser una mañana solemne en la sinagoga Heaton Park, en Manchester, durante la celebración del Yom Kippur, la festividad judía más importante, se convirtió en tragedia cuando un hombre embistió en coche a las personas que se encontraban cerca del templo. A continuación, el atacante salió del vehículo para empezar a apuñalar a la gente.
Al menos dos personas han muerto en el ataque y el agresor ha sido abatido a tiros por la policía. Otras tres personas han resultado heridas de gravedad, aunque las cifras podrían ser más altas. El primer ministro británico, Keir Starmer, ha regresado urgentemente a Londres desde la capital de Dinamarca, Copehanhague, donde se encontraba para asistir a una ‘cumbre’ de la Unión Europea. La policía han calificado la acción de «atentado terrorista», aunque por el momento no ha informado acerca de la identidad o los móviles del asesino.
Además, las autoridades han confirmado que han efectuado dos arrestos relacionados con el ataque. La policía ha identificado al asesino, pero todavía no ha difundido la identidad de éste.
El atentado podría haber sido mucho peor. El asesino llevaba un chaleco con explosivos, y trató de entrar en el templo, pero la acción decisiva del guardia de seguridad de la sinagoga -que está entre las víctimas aunque no se sabe si herido o asesinado- y de varios fieles se lo impidió. También fue decisiva la intervención policial, ya que los agentes llegaron al lugar del incidente solo siete minutos después de haber recibido la primera llamada de emergencia.
Aparentemente, todo el asalto ocurrió en menos de diez minutos. El ataque, de claras resonancias antijudías, comenzó alrededor de las9:30 de la mañana (10:30, hora peninsular española). El cadáver del asesino estuvo varias horas en el lugar en el que había caído, para que los equipos de artificieros lo inspeccionaran y trataran de desactivar los artefactos explosivos. Finalmente, se ha llevado a cabo una explosión controlada en la zona.

En declaraciones a ‘Times Radio’, la emisora del diario conservador ‘The Times’, el miembro de la dirección del Consejo Representativo Judío del Gran Mánchester Raphi Bloom ha declarado que los judíos de la ciudad están enfrentando a un «tsunami de odio» desde los atentados del grupo terrorista palestino Hamas contra Israel del 7 de octubre de 2023 y la subsiguiente guerra en Gaza. Bloom, que también es miembro de la sinagoga de Heaton Park, ha afirmado que «anoche estuve allí rezando. Personas que conozco, amigos míos, estaban dentro. Para mí es algo increíblemente personal.»
El rey Carlos III ha expresado su «profunda consternación» por los hechos y Starmer, cuya mujer es, precisamente, judía, ha condenado el atentado, que ha calificado de «ataque horrible», mientras ofrecía «toda nuestra solidaridad con las víctimas y la comunidad judía de Mánchester y del país». El gobierno ha convocado un gabinete de crisis y ordenado el refuerzo de la presencia policial en las aproximadamente 454 sinagogas que hay en todo el Reino Unido. Precisamente, una de las víctimas del atentado es un guardia de seguridad que protegía la sinagoga, algo común en muchas instituciones judías en el Reino Unidos.
La comunidad judía en el Reino Unido es ligeramente inferior a 300.000 personas, lo que supone entre el 0,4% y el 0,5% de la población total del país, y se concentra especialmente en Londres y Mánchester.
Fuente: El Mundo