
Un vuelo transatlántico tuvo que realizar un aterrizaje de emergencia en el aeropuerto internacional de Minneapolis-St. Paul debido a fuertes turbulencias que causaron heridas a 25 pasajeros. El incidente ocurrió en un vuelo con destino a Ámsterdam que había despegado de Salt Lake City aproximadamente dos horas antes.
El avión, un Airbus A330-900, llevaba a bordo 275 pasajeros y 13 miembros de la tripulación cuando comenzó a atravesar una zona de turbulencia severa. Estas turbulencias, que pueden presentarse incluso en cielos despejados y sin aviso previo, son causadas por movimientos irregulares en las corrientes de aire a gran altura, especialmente cerca de las corrientes en chorro, donde masas de aire se desplazan a velocidades diferentes generando remolinos y sacudidas violentas.
Tras el aterrizaje, un equipo médico esperó para atender a los afectados, quienes fueron trasladados a hospitales locales para recibir evaluación y tratamiento. Aunque este tipo de lesiones graves debido a turbulencias en vuelo son poco comunes, los expertos advierten que podrían incrementarse en el futuro debido al impacto del cambio climático en los patrones atmosféricos.
La aerolínea informó que está brindando asistencia inmediata a los pasajeros afectados. Según datos oficiales de la Junta Nacional de Seguridad en el Transporte de Estados Unidos, desde 2009 se han registrado más de 200 casos de lesiones serias provocadas por turbulencias. Se calcula que cada año se producen alrededor de 5.000 incidentes severos o mayores de este tipo, en un total de más de 35 millones de vuelos a nivel mundial.
Fuente LA RAZÓN