
El presidente egipcio, Abdel Fattah al-Sissi, ganó las elecciones presidenciales del país con el 89.6% de los votos, asegurándose un nuevo mandato de seis años, anunció la Autoridad Electoral Nacional.
El jefe de la Autoridad, Hazem Badawy, dijo que la participación había alcanzado una cifra “sin precedentes” del 66.8% entre los 67 millones de votantes egipcios.
Más de 39 millones de electores votaron por Sissi, que lleva una década al frente del país.
El Presidente se enfrentaba a tres candidatos: Hazem Omar, líder del Partido Republicano del Pueblo y segundo en el escrutinio con el 4.5% de los votos, Farid Zahran, líder de un pequeño partido de izquierdas y Abdel-Sanad Yamama, del Wafd, un partido centenario pero ahora marginal.
La victoria de Sissi le garantiza un tercer mandato, que comenzará en abril y se supone que será el último, según la Constitución egipcia.
Su elección no es ninguna sorpresa en un país de 106 millones de habitantes acosado por múltiples crisis, que van desde el poder adquisitivo hasta la guerra en la vecina Gaza.
En plena crisis económica, la inflación se sitúa actualmente en el 36.4%, mientras que la moneda ha perdido la mitad de su valor y el precio de ciertos alimentos básicos sube cada semana.
Dos tercios de la población viven por debajo o justo por encima del umbral de la pobreza.
En las elecciones presidenciales de 2014 y 2018, Sissi ganó con más del 96% de los votos.
Fuente Africa News