Un yen japonés más débil fue un factor decisivo en la caída al cuarto puesto mundial ya que las comparaciones del PIB se hacen en dólares. El Gobierno nipón informó que la economía se contrajo a un ritmo anual del 0.4% entre octubre y diciembre, según datos de la Oficina del Gabinete sobre el PIB real, aunque creció un 1.9% en todo 2023.
En julio-septiembre se contrajo un 2.9%. La contracción económica de dos trimestres consecutivos se considera el indicador de que una economía se encuentra en una recesión técnica.
Sin embargo, la relativa debilidad de Japón refleja una disminución de su población y un retraso en su productividad y competitividad. Tanto la economía japonesa como la alemana están impulsadas por pequeñas y medianas empresas fuertes con una productividad sólida.
La economía de Japón fue la segunda más grande hasta 2010, tras ser superada por la de China. Su PIB ascendió a 4.2 billones de dólares el año pasado, mientras que el de Alemania fue de 4.4 o 4.5 billones, según la conversión de divisas.
Hace poco más de un año Alemania afrontaba noticias negativas sobre su economía. De hecho la mayor potencia industrial de la Unión Europea se estancó en el segundo trimestre de 2023 después de haber entrado en recesión técnica por su dependencia del gas ruso.
¿A qué se debe el declive económico de Japón?
El motivo del declive se debe a la debilidad del yen japonés. Las autoridades japonesas intentaron salir en defensa de la divisa. Sin embargo, las severas advertencias resultaron ineficaces, por ahora.
«El principal diplomático japonés en materia de divisas, Masato Kanda, comunicó su descontento en torno a los rápidos movimientos del yen que, según él, podrían tener un efecto adverso en la economía. Kanda llegó incluso a sugerir la intervención en el mercado de divisas como posible solución al asunto», afirmaron estrategas de mercado.
«Las autoridades japonesas ya intervinieron en el mercado de divisas en septiembre y octubre de 2022, cuando vendieron dólares y compraron yenes para reforzar el valor de la moneda local. Se informó de un esfuerzo de casi 20 000 millones de dólares para fortalecer el yen, que al final se consiguió. Fue la primera intervención en dólares y yenes en 24 años y pronto podría repetirse si Tokio se cansa de las repetidas advertencias», añadieron los analistas.
Por su parte, el ministro japonés de Finanzas, Shun’ichi Suzuki, reiteró la importancia de que las divisas se muevan de forma estable y reflejen los fundamentos económicos; y reveló que están observando los movimientos de las divisas con mucha atención.
Fuente Euronews