
Estos ataques israelíes causaron daños significativos en amplias áreas de tierras agrícolas y huertos en el sur de Líbano y mataron a miles de animales de granja, incluidas ovejas, cabras y vacas, señaló el ministro interino de Agricultura, Abbas Hajj Hassan.
El ejército israelí usa la catapulta, un arma de la Edad Media y similar a las utilizadas en Roma, para llevar a cabo operaciones incendiarias en tierras agrícolas en el sur del Líbano.
El ejército permitió publicar el empleo del artefacto para “despejar” los campos del sur de Líbano.
Un video circulado en las redes sociales permite ver a soldados encender una bola de fuego y lanzarla más allá de la valla fronteriza.
El término «despeje» usado por las tropas israelíes describe el proceso de eliminar obstáculos u objetos que puedan bloquear la visibilidad o representar peligros como explosivos improvisados o posiciones militares, incluidas curvas, plantas, árboles, huertos y edificios.
Las referidas maniobras son realizadas con bulldozer blindado D9, pero en la frontera libanesa, el ejército optó por el método antiguo.
Estos ataques israelíes causaron daños significativos en amplias áreas de tierras agrícolas y huertos verdes en el sur del Líbano.
Conforme al ministro interino de Agricultura, Abbas Hajj Hassan, el organismo registró 613 incendios en una superficie de 210 km² de extensiones agrícolas.
Los bombardeos destruyeron alrededor de 800 hectáreas de terreno, incluidos más de 50 mil olivos, algunos de los cuales tienen más de 300 años.
Hajj Hassan enfatizó la imposibilidad de proporcionar cifras precisas sobre el alcance de los daños en esta etapa, ya que los bombardeos israelíes continúan a diario.
Fuente Al Mayadeen