
La Resistencia Islámica de Líbano llevó a cabo una serie de ataques contra posiciones y concentraciones de soldados israelíes en la frontera con Palestina.
La Resistencia Islámica de Líbano (Hizbullah) atacó con drones una posición de soldados israelíes dentro del sitio de Al-Baghdadi y logró impactos directos.
Comunicó el ataque con proyectiles de artillería contra el sitio de Al Raheb “después de anticipar y dar seguimiento a las fuerzas israelíes y monitorear el movimiento de un grupo de soldados”. Según la información, logró bajas en las filas hebreas.
Hizbullah también atacó con proyectiles de artillería el sitio de Jal al-Alam y con misiles los sitios de Ramtha y al-Samaqa en las colinas libanesas de Kfar Shuba.
La Resistencia logró un ataque directo con misiles al sitio de Zabdin, en las granjas libanesas de Shebaa.
El ex-embajador de Israel en Washington, Michael Oren, confirmó que Hizbullah representa una amenaza estratégica y describió como “horrible” lo que podría hacerle a Israel en sólo tres días.
En una entrevista, Oren, quien ocupó el cargo durante el mandato del ex-presidente de Estados Unidos, Barack Obama, afirmó: “Se trata de destruir toda nuestra infraestructura básica, refinerías de petróleo, bases aéreas e instalaciones”.
Los riesgos de una guerra con Líbano
Habló de lo que podría suceder en caso de una confrontación a gran escala con Hizbullah en el Líbano en momentos que la guerra en Gaza agota las capacidades del ejército de Israel.
“El curso cambiante de la guerra en Oriente Medio y el creciente riesgo de que el conflicto regional se amplíe día tras día” centró la atención de medios británicos. Un reportaje se refirió a las posibles consecuencias de una confrontación a gran escala entre Hizbullah en el Líbano e Israel.
“Aunque los esfuerzos del ejército israelí para desarraigar las redes de Hamas en Rafah disminuyen, su atención se desplaza de Gaza hacia el norte a lo largo de las zonas fronterizas con el Líbano, donde se forma un campo de batalla que puede atraer a Irán“.
Señaló que Estados Unidos está preocupado y ha enviado a su mediador especial, Amos Hochstein, a Beirut e Israel. Al respecto, consideró que esta situación es lo último que afrontará la actual administración de la Casa Blanc, y constituye un “enredo de alto riesgo”.
Como no realista calificó la opción de “reponer las fuerzas y redesplegarlas en el norte para llevar a cabo una operación corta y fuerte que dañará a Hizbullah y lo obligará a retirarse de las zonas fronterizas”.
“Hizbullah está armado hasta la médula, derribó costosos drones israelíes Hermes 900 y utilizó armas antiaéreas contra sus aviones”.
Al respecto, agregó que el secretario general de la Resistencia de Líbano, Sayyed Hassan Nasrallah, “mantuvo la guerra a un nivel modesto después del 7 de octubre” pues hasta ahora se produjeron 2100 ataques contra Israel, que es un poco menos que el umbral de una guerra integral”.
Tres preguntas geopolíticas importantes para el mes siguiente:
Primero: “si a Gaza le sigue la invasión del Líbano, ¿cómo terminará el asunto en una guerra eterna para Israel? Y alertó que la guerra puede aislarlo de aliados potenciales en el mundo árabe y conducir a la tensión en las relaciones con la actual administración estadounidense o la próxima.
En segundo lugar: “¿qué puede mostrar esta guerra sobre el ejército israelí, que alguna vez fue la fuerza preeminente en Medio Oriente, pero que ahora pierde impulso?” Un video muestra a soldados del ejército con una herramienta parecida a una catapulta -un arma de la Edad Media- para prender incendios en el sur del Líbano.
Finalmente: “¿qué daños sufriría la economía israelí en medio de guerras aparentemente interminables?” En este punto, advirtió que “la guerra de 1973 condujo a una década de lento crecimiento, quiebras bancarias y un aumento masivo de la inflación”.
Fuente Al Mayadeen / HispanTV