
El discurso esgrimido es que ya esos partidos perdieron su esencia y su ideología.
La verdad es que la política se ha convertido en un mercado persa, donde hay compra y venta.
Aunque parezca una sumatoria la verdad es que con cada alcalde del PLD, FP o PRD que pasa al PRM se cercena el derecho de los auténticos del PRM a aspirar con posibilidades.
Ese ejercicio parece correcto, en la aritmética electoral, pero el tiempo demostrará que no es así.
Daygorod Fabián Sánchez