
Supuestamente principal responsable del ataque contra un desfile militar en el suroeste del país que dejó 25 muertos en 2018
Habib Farayolá Chaab, conocido como Habib Osaivad, líder sueco-iraní del grupúsculo Al-Ahvazia, ha sido ejecutado este sábado, según reporta la agencia de noticias Mizan, afiliada al Poder Judicial de Irán.
En marzo pasado, la Corte Suprema de Irán confirmó la pena de muerte para Habib Chaab, por cargos de “corrupción en la tierra” a través de la formación, gestión y el liderazgo del grupúsculo Al-Ahvazia, así como el diseño y la ejecución de numerosas operaciones terroristas en la provincia iraní de Juzestán.
Chaab, detenido en noviembre de 2020, es el responsable principal del atentado terrorista en septiembre de 2018 contra un desfile militar en la ciudad iraní de Ahvaz, el cual dejó unos 25 muertos y decenas de heridos.
Al-Ahvazia también ha llevado a cabo otros ataques contra la seguridad nacional de la República Islámica, incluidos atentados con bomba en centros gubernamentales y robos a mano armada.
En total, cientos de iraníes han muerto o resultado heridos en los actos terroristas de los miembros de este grupo en cuestión.
Fue respaldado por servicios de espionaje europeos y regionales, según Irán
Supuestamente, Osaivad era líder de Al-Ahvazia desde 2005, apoyado por ciertos servicios de espionaje, incluido el Mossad del régimen de Israel y el Sapo de Suecia, así como algunos servicios de los países regionales.
Como consecuencia de los actos terroristas y sangrientos de Al-Ahvazia, cientos ciudadanos iraníes han muertos o resultado heridos.
El enfoque de las actividades de este grupo terrorista ha sido las operaciones destructivas, asesinatos y ataques con bomba en la zona suroeste de Irán, especialmente en la provincia de Juzestán, tratando de hacer que esta provincia sea insegura y que incremente la tentativa separatista.
Entre las medidas desestabilizadoras de esta banda se puede aludir a ataques con bomba en centros gubernamentales, líneas de transmisión de petróleo e instalaciones de bombas.
Osaivad, que, antes de ser detenido, residía en Suecia, «confesó» en las sesiones de su juicio que diseñaba operaciones terroristas contra Irán, desde ese país y otros países occidentales.
Supuestamente durante su estancia en Suecia, estuvo bajo la protección del paraguas de seguridad del servicio de espionaje de este país.
Asimismo, «admitió» haber tenido vínculos con varias figuras prominentes del Mossad de Israel y la Agencia Central de Inteligencia (CIA, por sus siglas en inglés) de Estados Unidos.
Según sus propias «declaraciones», tomó varias medidas para formar la secta takfirí en Juzestán, y los elementos de Al-Ahvazia han estado tratando de reclutar a la gente en las últimas dos décadas.
Chaab, de igual modo, «reconoció» ante el tribunal que la promoción de la ideología takfirí fue decidida por el laboratorio de ideas de Al-Ahvazia en uno de los países de la región.
También «admitió» vínculos entre el grupúsculo bajo su mando y el grupo terrorista Daesh.
El tribunal confirmó su condena a muerte el 12 de marzo, una decisión condenada por Suecia. «La pena de muerte es un castigo inhumano (…) y Suecia, como el resto de la UE, condena su aplicación en cualquier circunstancia», declaró el ministro sueco de Asuntos Exteriores, Tobias Billstrom.
Irán es el país que más personas ejecuta después de China, según las organizaciones de derechos humanos, que estimaron en 582 el número de ahorcamientos en 2022.
Fuente HispanTV y Euronews







