
El presidente depuesto de Níger, Mohamed Bazoum, pide la ayuda de su aliado EEUU y de la comunidad internacional para poder retomar el poder de la junta militar.
“En nuestra hora de necesidad, hago un llamamiento al Gobierno de Estados Unidos y a toda la comunidad internacional para que nos ayuden a restaurar nuestro orden constitucional (…) el pueblo de Níger nunca olvidará su apoyo en este momento crucial de nuestra historia”, afirmó Bazoum, un aliado de las potencias occidentales quien fue destituido la semana pasada por una junta militar y sigue retenido en el palacio presidencial.
En una nota editorial para el diario ‘The Washington Post’, Bazoum se presenta a sí mismo como “rehén”, denunciando que “se mantiene bajo el ataque de una junta militar que está tratando de derrocar la democracia del país y al mismo tiempo condena cualquier intento de derrocar su gobierno».
“Este golpe, lanzado contra mi gobierno por una facción militar el 26 de julio, no tiene justificación alguna. Si tiene éxito, tendrá consecuencias devastadoras para nuestro país, nuestra región y el mundo entero”, alertó, recordando que llegó al poder en 2021 a través de unas elecciones democráticas.
Junta militar en Níger corta lazos con Francia
La junta militar de Níger desechó una serie de acuerdos de cooperación militar con Francia, su antigua potencia colonial, en un intento por poner fin a la presencia de las fuerzas francesas en todo el país africano y el posterior saqueo de los recursos de la empobrecida nación que reside en un país rico en minas de uranio y el petróleo.
En un discurso televisado, Amadou Abdramane, el representante del gobierno militar, anunció la ruptura de cinco contratos militares con Francia que datan entre 1977 y 2020. Además, cesó a los embajadores del país ante Francia, Nigeria, Togo y Estados Unidos, para luego advertir a la población que vigile a los ejércitos y espías extranjeros.
Asimismo, los militares advirtieron que tomarán represalias “inmediatamente” en caso de “agresión o intento de agresión” contra su país.
Francia, un estrecho aliado del gobierno de Bazoum, tiene unos 1500 soldados en Níger, uno de sus últimos socios en la zona, después de que las fuerzas de París se vieron obligadas a retirarse del vecino Malí a principios de este año. En Níger, no solo hay fuerzas francesas, sino también soldados estadounidenses y de otros países europeos.
Burkina Faso y Mali ya han expulsado a las tropas francesas, muchas de las cuales ahora están estacionadas en Níger. Estos dos vecinos de Níger han advertido que considerarán como “declaración de guerra” cualquier intervención extranjera ahí.
Los socios regionales y occidentales de Níger, incluida Francia, impusieron amplias sanciones en un intento por presionar a los líderes de la junta militar para que devuelvan el poder después de la destitución de Bazoum.
Sin embargo, Abdourahamane Tiani, ex líder de la guardia presidencial de Níger y líder del gobierno militar, dijo que estas sanciones no los harán retroceder de su posición.
Fuente HispanTV