
Investigación en Suecia de los tumultos en un festival eritreo que acabó con cincuenta heridos y más de cien detenciones.
Los enfrentamientos se dieron entre los organizadores del evento, partidarios del Gobierno de Eritrea, y un grupo contrario. Los opositores empezaron prendiendo fuego a tiendas y coches. Todo acabó en una batalla campal a palos y piedras mientras la policía intentaba separar a los contendientes.
Los críticos argumentan que el festival, que se celebra a las afueras de Estocolmo, intenta blanquear la imagen del régimen dictatorial del país africano.
Las autoridades suecas analizarán ahora si continúan permitiéndolo.
Fuente Euronews