
El presidente de Namibia, Hage Geingob, recibió a su homólogo de Cuba, Miguel Díaz-Canel, en la capitalina Casa de Estado para sostener conversaciones oficiales.
Al recibirlo hoy en la Casa de Estado, el mandatario namibio escribió en la red X (anteriormente Twitter), “nuestra casa es tu casa. En Namibia consideramos a los cubanos como nuestros hermanos y hermanas”.
Durante las conversaciones Geingob recordó los lazos históricos que unen a ambos pueblos y resaltó la actual cooperación de especialistas cubanos en Namibia en áreas como la medicina, entre otras.
Asimismo, denunció el bloqueo de los Estados Unidos contra Cuba, que impide incluso la compra por parte de Cuba de insumos médicos en el mercado norteamericano.
¿Qué crimen ha cometido Cuba para ser sancionada de esa manera?, se preguntó Geingob.
De su lado, el presidente cubano resaltó que la visita tiene una especial significación, entre otras razones porque la actual generación de dirigentes cubanos se autodefine como de continuidad de la Revolución y en ello se incluye la solidaridad con nuestros hermanos, incluyendo el fortalecimiento de nuestra amistad con Namibia, su gobierno y su pueblo.
Díaz-Canel ratificó asimismo la voluntad de proseguir y fortalecer la cooperación con esta nación africana y aumentarla en las esferas de la construcción, informática (incluida la inteligencia artificial, la robótica, y seguridad informática) y también en cultura y deportes, si Namibia lo necesita.
En su intervención, recordó como de tierras africanas, namibias, fueron arrancados sus hijas e hijos por los colonialistas para llevarlos a las tierras cubanas y convertiros en esclavos.
Esos esclavos, agregó, lucharon por su libertad, incorporándose a las luchas por la libertad de Cuba.
Dejaron de ser esclavos luchando por Cuba y le aportaron a la nacionalidad cubana sus cultura, creencias, sentimientos, sus colores, su rebeldía y valentía.
Ahora, cuando el presidente Geingob reconocía a los internacionalistas cubanos que lucharon en Angola junto a los luchadores de la Swapo, podemos decir que ese valor ustedes nos lo dieron, resaltó el Presidente.
Por eso Fidel Castro decía que los cubanos somos latinoafricanos.
Estamos orgullosos de ser mestizos y cuando vinimos a estas tierras, según dijo Fidel, vinimos a saldar nuestra deuda con África.
Luego de la independencia de Namibia, prosiguió, han sido más de 30 años de colaboración permanente en los cuales hemos desarrollado proyectos en beneficio de los pueblos.
Ahora, enfatizó Díaz-Canel, ratificamos nuestra expresa voluntad de que esos sentimientos sean llevados también a las nuevas generaciones de cubanos y namibios y que nunca se pierda la memoria histórica, a la cual ustedes han sido muy leales.
El mandatario cubano también agradeció la postura de Namibia en denuncia del bloqueo, su actitud de promotores de la iniciativa para que en la Unión Africana todos los años se aprueben resoluciones contra él y el voto enérgico en la asamblea general de la ONU por la resolución contra esa medida de los Estados Unidos.
En el encuentro oficial, Díaz-Canel cursó a Geingob una invitación para realizar una visita oficial a Cuba.
También propuso que este año, en la sexta reunión bilateral de cooperación, incrementar la jerarquía de ese mecanismo de cooperación e implementar la comisión intergubernamental, así como aumentar colaboración entre el Partido Comunista de Cuba y la Swapo en temas de superación.
Finalmente, expresó su deseo que para la venidera cumbre del G77 y China sobre ciencia y tecnología, a realizarse en septiembre en La Habana, África esté bien representada y en particular “Namibia por el liderazgo que ustedes tienen en la región”.
Discurso pronunciado por Díaz-Canel en Namibia

Discurso pronunciado por Miguel Mario Díaz-Canel Bermúdez, Primer Secretario del Comité Central del Partido Comunista de Cuba y Presidente de la República, en el acto por el Día de los Héroes de Namibia, en el Estadio de la Independencia, Namibia, “Año 65 de la Revolución”.
Permítanme transmitir un caluroso saludo del Partido Comunista de Cuba, del Gobierno y el pueblo cubanos al heroico pueblo de la República de Namibia, al que nos unen lazos de hermandad indestructibles.
Soy también portador de un afectuoso saludo para todos ustedes del General de Ejército Raúl Castro Ruz, Líder de la Revolución Cubana.
Agradezco la invitación del entrañable compañero presidente Geingob no solo para realizar una visita oficial a Namibia, sino para en nombre de Cuba participar como invitado especial en esta importante conmemoración del 26 de agosto, Día de los Héroes de Namibia.
Hoy, junto a ustedes, rendimos emocionado y merecido tributo a los héroes y heroínas de este país, quienes con el sacrificio de sus vidas abonaron el camino a la definitiva independencia de su patria. Un especial reconocimiento al Padre fundador de esta nación, el Doctor Sam Nujoma, querido amigo de Fidel y de todo nuestro pueblo (Aplausos).
“Namibia es la tierra de los bravos”, dice su hermoso himno, de ello pueden dar fe los internacionalistas cubanos que compartieron trinchera con los combatientes de la SWAPO en los difíciles días de la guerra en Angola.
Ustedes lucharon contra la injusticia en el campo de batalla y en la mesa de las negociaciones y Cuba se honra por haberlos apoyado. No había camino más honorable a la independencia de este hermano país.
A partir del 21 de marzo de 1990 Namibia se convirtió en un símbolo de la resistencia en el África Sudoccidental y con su victoria cavó definitivamente la tumba del oprobioso régimen del apartheid, que como un virus mortal se había extendido desde Sudáfrica hasta estas tierras.
Ese día terminó la barbarie y terminaron los sufrimientos del pueblo namibio, en cuya memoria quedan las huellas de episodios dantescos como la masacre de Cassinga. Allí se develó la entraña cobarde y genocida de los racistas sudafricanos, capaces de acribillar sin piedad a mujeres y niños refugiados en un campamento de la SWAPO.
Rescatados por internacionalistas cubanos, niños sobrevivientes de la matanza encontraron familia, hogar y escuela en nuestro país (Aplausos). Allí Fidel los acogió como hijos, no solo para que estudiaran sino para curarles del espanto vivido.
Sé que algunas de aquellas víctimas se encuentran hoy en este acto. A la memoria de sus familiares caídos y a la digna resistencia que les permitió a ustedes sobrevivir al horror, rendimos sentido tributo hoy (Aplausos).
Estimados compañeros:
Desde 1990 Namibia ha logrado ser un ejemplo de paz y concordia como nación, valores que irradia a la región y al mundo.
Con la misma firmeza con que se negó a seguir siendo colonia, Namibia exhibe hoy una admirable verticalidad de principios contra las injusticias de este mundo y en defensa de las causas de los pueblos.
Nuestras naciones marchan juntas en el arduo camino al desarrollo. Con ese fin miles de nuestros compatriotas han laborado en este país y lo siguen haciendo en la salud, la educación, la pesca, el transporte y la construcción (Aplausos).
Los cubanos que combatieron en Angola por Namibia en cumplimiento del sagrado deber internacionalista, pueden sentirse satisfechos, porque su sacrificio contribuyó decisivamente a la independencia de una nación que enorgullece a sus hijos y Cuba ganó para siempre el respeto y el afecto de un aliado firme, valiente y honesto (Aplausos).
No es un secreto para nadie y menos para quienes siguen de cerca la realidad del país, que Cuba atraviesa por una difícil coyuntura socioeconómica que tiene como causa principal la persistencia, por más de sesenta años, del bloqueo económico, comercial y financiero de los Estados Unidos de América, que ha escalado en los últimos tres años a niveles de presión sin precedentes, con efectos muy visibles en el nivel de vida de nuestro pueblo.
El cerco es tan brutal que ni siquiera durante el difícil periodo de la pandemia de COVID-19 el gobierno de ese país escuchó la demanda mundial de que se redujeran o aliviaran las medidas coercitivas unilaterales contra Cuba.
Si a lo anterior se suman también los nocivos efectos de las diferentes crisis globales que están impactando fuertemente en el precio de los alimentos, el acceso a los combustibles y en el cambio climático, se comprenderá la gravedad de los desafíos que enfrentamos.
Por eso agradecemos muy sinceramente al gobierno de Namibia por promover cada año en la Unión Africana la adopción de resoluciones contra el bloqueo a Cuba, y por hacer escuchar su voz desde el podio de la Asamblea General de la Organización de las Naciones Unidas y mantener un consistente apoyo a favor de las resoluciones sobre el tema en ese órgano (Aplausos).
Querido Presidente Geingob:
Estar en Namibia en el día en que honra a sus héroes y heroínas, en que agradece a sus veteranos y exalta el honroso aporte de todo el pueblo en la lucha por una patria libre e independiente, nos trae a la memoria una canción que toda Cuba canta en días de honrar a los héroes y que fue siempre una de las preferidas de Fidel. Concluyo mis palabras con una de sus más populares estrofas:
“A los héroes/ se les recuerda sin llanto, /se les recuerda en los brazos, /se les recuerda en la tierra; / y eso me hace pensar/ que no han muerto al final, /y que viven allí /donde haya un hombre, /presto a luchar, /a continuar”.
¡Gloria eterna a los héroes y mártires de Namibia! (Exclamaciones de: “¡Gloria!”)
¡Viva la eterna amistad entre nuestros pueblos! (Exclamaciones de: “¡Viva!”)
¡La lucha continúa, la victoria es cierta!
¡Patria o Muerte!
¡Venceremos! (Exclamaciones de: “¡Venceremos!”)
Fuente ACN