Las Brigadas Al-Quds – Brigada de Yenín aseguran haber provocado bajas directas entre las filas enemigas mientras los soldados intentaban entrar a la ciudad y el campamento, controlados por las fuerzas palestinas.
Las Brigadas de Jerusalén – Brigada Yenín protagonizaron una operación de enfrentamiento masivo en la madrugada con tropas del ejército de Israel que pretendían penetrar en la ciudad de Yenín y su campamento, en el norte de Cisjordania.
En Palestina, las fuerzas israelíes debieron retirarse de la ciudad después de redadas que duraron horas.
A raíz de este suceso, el Ministerio de Salud palestino confirmó la muerte de cuatro combatientes y cinco heridos, dos de ellos de gravedad.
A su vez, el batallón aseguró haber dañado varios de los 30 vehículos enemigos y ocasionarles, también, muertos y heridos.
Una fuente de las brigadas narró que encontraron rastros de sangre en el casco abandonado de un soldado y en varios equipos abandonados por el ejército israelí en el campo de Yenin, en su precipitada partida.
Al mismo tiempo, las fuerzas israelís lanzaron una campaña de arrestos en el campo de Dheisheh, Janata, Nahalin y Beit Fajjar, en el distrito de Belén, en la región sur de Hebrón, Ramallah y Nablus.
El Club de Prisioneros Palestinos confirmó que las fuerzas israelís arrestaron a 60 ciudadanos en varias zonas de Cisjordania.
Las Brigadas de los Mártires de Al-Aqsa llevaron a cabo varias operaciones contra puestos de control israelí y puntos en Cisjordania.
En Ramallah, cinco combatientes murieron en Cisjordania durante el enfrentamiento palestino con las fuerzas israelís en el campo de Dheisheh, en Belén, hacia donde se enviaron refuerzos militares para arrestar a un palestino.
Desde el inicio de la batalla Diluvio de Al Aqsa, el pasado 7 de octubre, el número de muertos en Cisjordania llegó a 119 y el de heridos superó los 1900.
Fuente HispanTV
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