Pese a las prohibiciones de los gobiernos francés, alemán y británico, las manifestaciones pro palestinas se han producido en varias ciudades europeas.
En París los manifestantes que acudieron a dos convocatorias a favor de la población palestina fueron dispersadas con gas lacrimógeno, cañones de agua y la intervención de policías antidisturbios.
En Ginebra, cerca de la sede de Naciones Unidas, los manifestantes exigieron el cumplimiento de numerosas resoluciones de la Asamblea General de las Naciones Unidas y del Consejo de Seguridad que exigen una resolución pacífica del conflicto.
Los participantes calificaron la agresión de Israel en Gaza como crímen de guerra.
Adel Mejri, vicepresidente de la asociación de víctimas de la tortura en Túnez explicó: «¡La ONU debe actuar, las organizaciones internacionales deben actuar, pero no para defender a Israel, sino para implementar las resoluciones! Lo que simplemente estamos pidiendo es simple: hay resoluciones, hay leyes, hay convenciones de Ginebra»
También se producen protestas proisraelíes, menos numerosas en cuanto a participantes. En Amsterdam, los manifestantes reconocen que Israel pierde la «guerra de las redes sociales» por la difusion de imágenes de los bombardeos en Gaza y como dañan a la población civil. Insisten en la necesidad de mostrar su apoyo a las decisiones del gobierno de Israel.
En Moscú, hubo una doble entrega floral a la embajada de Israel, y también a la sede de la representación palestina.
El Kremlin no expresó ni condena ni apoyo abierto a ninguna de las partes, el ministerio de Exteriores de Rusia pidió un «alto el fuego y el rechazo de la violencia».
Al mismo tiempo, Rusia responsabilizó de facto a Occidente de la escalada de la violencia.
Fuente Euronews