29 de mayo
La dignidad inherente a la vida no se manifiesta en soledad. Por el contrario, es a través de nuestro contacto activo con otras personas cuando su naturaleza única e irreemplazable se torna manifiesta. Al mismo tiempo, la determinación de proteger esa dignidad contra cualquier atropello engalana y brinda esplendor a nuestra propia vida.
—Daisaku Ikeda