
16 de junio
El que ama la naturaleza puede valorar a los otros, puede atesorar la paz y adquirir una riqueza de corazón ajena a la especulación egoísta de la ganancia o la pérdida. Los que viven de manera calculadora terminan calculando a pérdida su propio valor y viviendo de manera sumamente limitada. La naturaleza, por su parte, es infinita.
—Daisaku Iked