Dedicado a Viviana Veloz, legisladora valiente de la Revolución Ciudadana, con mi solidaridad a Ella y la Comisión Legislativa Investigadora del caso conexión presidente Lasso y mafia albanesa.
«No creo que cuestionar las cosas sea una enfermedad. La obediencia ciega y sin cuestionamientos es la enfermedad» (Spinoza)
En su twitter el abogado guayaquileño Pedro Granja denuncia esta barbaridad ocurrida:
«URGENTE: En este momento, la asambleísta Viviana Veloz está en la Fiscalía: Amenazan con asesinar a sus padres si sigue investigando. Lo que pasa en Ecuador realmente es una tragedia. Por favor ayuden a difundir esto. Nuestra irrestricta solidaridad con Viviana».
Al respecto, el siguiente mensaje puse justo ayer a Viviana Veloz, asambleísta de la Función Legislativa e integrante de la Comisión Multipartidaria que investiga el caso nexos entre el gobierno y Guillermo Lasso con la mafia albanesa, una de las más peligrosas y sanguinarias del mundo. El caso fue indagado desde mediados a fines del 2021 por la unidad anti-narcóticos de la Policía, y su informe entregado a los máximos jefes policiales y fiscales, fue extrañamente ordenado archivarse por el poder y declarado reservado y secreto, hasta que jóvenes periodistas ecuatorianos del medio digital La Posta lo conocieron y revelaron en el 2023 en el llamado caso «El Gran Padrino».
Aquí mi mensaje a Viviana, a quien no conozco presencialmente todavía, sino por su actividad legislativa llena de coraje. No es necesario conocerla cuando se trata de solidarizarse:
«Asambleísta Viviana Veloz le saluda el defensor de derechos Alexis Ponce. Le felicito por su valentía y su preparación al frente de temas tan complejos. Quiero compartirle referencias, bibliografía y documentos históricos generales sobre el tema que investigan. De 2017 a 2022 me pasé buscando, investigando, sintetizando y difundiendo en entrevistas y diálogos en varios espacios públicos y sociales, materiales informativos necesarios de conocer, como Antecedente Histórico Global del caso que hoy nos indigna: la bancocracia y la mafialización del poder, que nos compromete a derrotarlo. Abrazos, alexisponce.b@gmail.com«
Ella tuvo el gesto de responderme brevemente a altas horas de la noche. Es mi intuición de viejo defensor: quizás para entonces, ya había recibido las amenazas contra lo más sagrado: la familia de aquel «Corazón Valiente» y contra Ella misma: «Gracias, Alexis. Viviana».
Acabo de enviarle un mensaje solidario en audio a esta joven y valerosa asambleísta. Es lo que me exige mi conciencia y mi razón de vivir.
Esta barbaridad ocurre en medio de un contexto terriblemente funesto: la comandancia de la policía ha rechazado permitir que varios de sus oficiales investigadores del caso «albanés» acudan a contestar preguntas de esta asambleísta y de la Comisión, a la vez que ha hecho circular un vídeo spot en solidaridad con el presidente, muy inusual en 40 años de democracia y con una lectura entrelíneas y simbólica de advertencia del poder al pueblo si acaso nos levantamos para exigir su renuncia o destitución, ambas vías que la Constitución prevé para un caso de esta dimensión.
Otro elemento de antecedente es la denuncia hecha desde la Legislatura, de que al pedir información al Consejo Nacional Electoral, de cómo y quién financió las campañas del sr. Lasso, les habrían entregado sólo de los años 2013 y 2017 pero que se negaron a enviar o no enviaron sin explicación alguna, del año 2021, justo en estas mismas semanas en que los periodistas de «La Posta» publicaron que el hoy prófugo y tristemente célebre sr. Chérrez, amigo personal de Danilo Carrera, super-cuñado de Lasso y presidente ejecutivo del Banco de Guayaquil, citara -al parecer en un audio grabado por la unidad policial antinarcóticos y difundido por La Posta, que ellos (él y la mafia albanesa) habrían aportado más de un millón de dólares a la campaña electoral del ahora presidente.
Cualquier situación similar y de menor gravedad incluso, en cualquier otro país con élites económicas, bancarias, sociales y mediáticas menos sinvergüenzas, ya habría llevado a cualquier presidente a renunciar por dignidad y sangre en la cara debido a los gravísimos riesgos que un caso de esa magnitud atrae a toda la población y a la honra de una nación.
Sólo en este quinquenio, enumeren cuántos jefes de Estado han puesto su renuncia en el mundo y encargado al vicepresidente o al legislativo el cargo hasta que culminen las investigaciones y empiece una transición. Pero en esos países no hay ministros Cucalones que amenacen con cerrar al poder legislativo si siguen investigando y le llaman a juicio al mandatario. Ni hay periodistas de la élite, medios hegemónicos y voces de alquiler que en coro se pasen defendiendo lo indefendible y a un gobierno manchado y con tan grave mal olor, sólo por terror a que «vuelva el tirano Correa».
El delito de odio aquí, en la pequeña Tirana, es virtud. Y la otra Tirana es… la capital de Albania: país que fue declarado por resolución del SRI, Servicio de Rentas Internas, del gobierno de Lasso en 2022, ser dejado fuera de los paraísos fiscales. Qué coincidencias…
Pero el contexto en que se produce la amenaza grave a Viviana y sus padres, que ella ha denunciado en Fiscalía, es también un contexto de indignación social, política y ciudadana mayoritaria, expresada en la apabullante derrota en elecciones y en la consulta, propinada por el pueblo al Sr. Guillermo Lasso y a su grupo de poder el 5 de febrero. Así como en los preparativos de movilizaciones sociales indígenas y urbanas, anunciadas para repudiar el caso de corrupción más vergonzoso y peligroso de las últimas cuatro décadas.
En cuanto al Ecuador y a ustedes:
Recuerden la Colombia de los ’80 y la Italia de siempre. Si hoy usted ecuatoriano y ecuatoriana, y ustedes ciudadanos solidarios en el mundo, callan estas barbaridades que hoy suceden en el Ecuador que el poder narcotizado y la mafiosa bancocracia albanesa han engendrado, el presente y el futuro serán inimaginables y harán de las suyas. Thomas Mann escribía: «La tolerancia es un crimen cuando lo que se tolera es la maldad».
Me pasé anunciando y denunciando el fenómeno de la mafialización del poder, de la policía, de la política y del Estado, desde el 2017, y no faltó quien callara, o prefiriera apagar sus micrófonos, o ver para otro lado, o juzgara «exageración». Ya se sabe que ‘los esclavos felices y conformistas son los mayores enemigos de la libertad’.
En una entrevista pública hecha días atrás a cuatro jóvenes periodistas de La Posta, el comunicador ecuatoriano Boscán compartió detalles que no sabíamos entre ellos: cómo uno de los jefes mafiosos albaneses al que entrevistaron, le hizo ver la foto del cadáver de alguien contra quien había ordenado que los sicarios entrenados lo exterminen con una motosierra, al estilo paramilitar mafioso desatado en la Colombia de los ’90 y en el México de Ciudad Juárez y Jalisco de esta década.
Eso no había en este país, carajo. Eso lo han sembrado estas fuerzas delictivas al amparo irresponsable y codicioso de un grupo de poder y el régimen, del señor Lasso y de hombres de su confianza hoy en indagaciones por un Imperdonable, Inolvidable e Imprescriptible delito.
NO callen. Es SU DEBER no callar. Deben solidarizarse con ella, con Viviana, y todas las asambleístas que investigan el peor caso de corrupción en las alturas, desde que la democracia se reinstalara en 1978.
No callen. Pronúnciense ya. O este pequeño país se convertirá en impune señorío feudal de la Camorra, la Cosa Nostra, la Kompañía Bello, la ‘Ndrangheta, cercana al poder político y financiero.
«¿Puedes pensar que la Mafia puede existir sin el apoyo de las instituciones del Estado? Estaría fuera de la ley», es la frase final con que concluye este texto. Y la frase es de Carmine Schiavone, capo italiano.
Fuente: Resumen Latinoamericano