
Estados Unidos busca más apoyo de los gobiernos del Golfo en su intento de detener el asedio yemenita al transporte marítimo comercial con destino a Israel, revelaron medios estadounidenses.
Arabia Saudita impidió al ejército estadounidense lanzar ataques a Yemen desde bases en territorio saudita, lo cual deja a un portaaviones de la Marina norteña como principal responsable de la campaña contra Saná en el Mar Rojo.
Por su parte, el subcomandante del Comando Central de Estados Unidos, almirante Brad Cooper, calificó el enfrentamiento contra Yemen en el mar Rojo como “la batalla más grande librada por la Armada de Estados Unidos desde la Segunda Guerra Mundial”.
Según el almirante Cooper, para esta misión asignaron unos 7000 marineros al mar Rojo y. hasta el momento. ya lanzaron unos 100 misiles tierra-aire contra los cohetes y drones de las fuerzas armadas yemenitas.
A propósito de estas acciones, la dirección política y militar de Saná reiteró, en numerosas ocasiones, que la navegación en los mares Arábigo y Rojo y el estrecho de Bab al-Mandab está garantizada para todos los barcos, con excepción de los israelíes o los de cualquier nacionalidad con mercancías para los puertos de Israel.
A partir de los bombardeos aéreos de la coalición encabezada por Estados Unidos y Reino Unido sobre territorio de Yemen, las fuerzas armadas de la nación árabe incluyeron entre sus objetivos legítimos de ataque a los barcos de ambas potencias.
Fuente Al Mayadeen