De acuerdo a la Organización Panamericana de la Salud (OPS) cerca de 8400 mujeres mueren cada año en la región por complicaciones relacionadas con el embarazo, el parto y el puerperio, siendo la mayoría de estas muertes evitables.
La pandemia de COVID-19 provocó un retroceso de 20 años en los avances para garantizar la salud materna en América Latina y el Caribe. En 2020, se produjeron 68 muertes maternas por cada 100 000 nacidos vivos, por debajo del objetivo regional de alcanzar una tasa de 30 muertes por cada 100.000 nacidos vivos para 2030.
Ante estos datos la OPS y Merck, conocida como MSD fuera de los Estados Unidos y Canadá, firmaron una carta de intención sobre una posible colaboración para mejorar la atención médica y los resultados de salud materna para las mujeres y madres en las Américas.
«Nos complace iniciar conversaciones sobre esta colaboración que podría ayudar a reducir las muertes maternas en América Latina y el Caribe«, afirmó el doctor Jarbas Barbosa, Director de la OPS. «En una región con recursos limitados, el sector privado es un socio importante para lograr la cobertura de salud universal», añadió.
Además de mejorar la capacidad de los trabajadores y de los sistemas de salud de la región para mejorar la salud materna, la colaboración OPS/Merck podría fomentar la equidad sanitaria y ampliar el acceso a la salud en ámbitos que van más allá de la salud materna.
Fuente DiarioSalud.do