Los integrantes de Semilla, el partido que ganó las elecciones presidenciales, señalaron que el presupuesto tiene varias ilegalidades, candados excesivos que entorpecen la inversión social al disminuir fondos a las carteras de Salud y Educación y otorga aportes a empresas y ONG vinculadas al oficialismo.
“Intentan garantizar el pago a empresas constructoras y ONG específicas, pasando por encima del proceso legal y asegurando el pago de sus clientes, probablemente sus financistas… Un grupito de delincuentes enquistados en el Estado intenta negar al pueblo lo que le corresponde”, escribió el presidente electo Bernardo Arévalo en su cuenta de X, cuando ya los diputados de la alianza oficial habían empezado con la aprobación en tercera lectura del proyecto de Presupuesto 2024.
Luego del primer intento fallido por despojar de su inmunidad a los magistrados del Tribunal Supremo Electoral (TSE), el pleno del Congreso apresuró el paso para aprobar un presupuesto de Q124 millardos 879 millones 970 mil para el ejercicio fiscal 2024.
Arévalo calificó de absurdo, corrupto e ineficiente el proyecto que estaba siendo discutido.
En el presupuesto fueron incluidas asignaciones presupuestarias por Q12.3 millardos a varias asociaciones, fundaciones, organizaciones y otras vinculadas a la atención de Salud, Gobernación, Ambiente, Trabajo, Cultura, Economía, Finanzas y algunas Secretarías.
Aunque varias de estas organizaciones han demostrado su funcionalidad, según los diputados opositores existen algunas de estas que son de reciente creación vinculadas a los diputados y a sus financistas.
Buscaron frenar su aprobación
Ante el avance de la discusión del Presupuesto, la diputada Andrea Villagrán y los miembros de la bancada Semilla presentaron más de 130 enmiendas para corregir el presupuesto; sin embargo, la Junta Directiva apresuró el paso para garantizar que pasara el presupuesto, que la oposición calificó como contrario a los intereses de la población.
La directiva leyó a medias las enmiendas y Villagrán, Samuel Pérez y Mario Chen Yat protestaron por el procedimiento. Una de las enmiendas presentadas buscaba asegurar Q195 millones para iniciar con los estudios de prefactibilidad para la construcción del metro en la ciudad de Guatemala, pero la misma fue rechazada.
Finalmente, todas las enmiendas propuestas por Semilla y Villagrán fueron rechazadas con un tiempo de votación aproximado a un minuto y así lograron culminar con la aprobación del presupuesto.
Varios rumores circularon toda la tarde sobre posibles sobornos a diputados de las bancadas que integran la alianza oficial para que dieran sus votos al proyecto presupuestario presentado por el gobierno saliente de Alejandro Giammattei.
El excandidato presidencial, Edmond Mulet, también utilizó sus redes sociales para recordar a los diputados que “Q450 mil no les alcanzará para restituir su honorabilidad”, por lo que, con cada voto se evidenciará si están a favor o en contra de la democracia.
Es un “chantaje” para el nuevo gobierno
El presidente electo, Bernardo Arévalo, publicó en sus redes sociales que el presupuesto de 2024 “es una bofetada” para el pueblo, ya que no responde a los intereses de la población si no a los del gobierno actual.
Quieren obligar al Ministerio de Finanzas a pedir permiso cada mes para realizar operaciones rutinarias, lo cual “es un chantaje innecesario”.
“Un presupuesto promueve la corrupción. Le pone candados a proyectos de infraestructura sin legitimidad. ¡Algunos de ellos incluidos de forma exprés!”, publicó Arévalo en sus redes sociales.
El diputado Samuel Pérez indicó que “un presupuesto así podría meter en problemas, no al gobierno, sino completamente al país y al desarrollo y la capacidad de dar resultado; incluso a los diputados distritales porque con este presupuesto es imposible llevar infraestructura, por más que ellos quieran gestionar”.
Pérez también explicó que con la aprobación de este presupuesto se impide la creación de nuevos institutos, centros de salud, carreteras y caminos rurales y toda la política social. Por lo que el diputado de Semilla dijo que preferían tener un presupuesto Q10 millardos menor a “esta aberración”.
En tanto que, la diputada del bloque Semilla, Ligia Hernández, dijo que con este presupuesto se le están atando las manos al nuevo Gobierno por la gran cantidad de candados que están poniendo para que el mismo sea ejecutado.
A una hora del plazo final
A las 22:30 horas cuando ya solo faltaba una hora y media para el plazo establecido en ley para aprobar el presupuesto, los diputados de Semilla buscaban ganar tiempo presentado mociones de revisión y lograr con esto que a la alianza oficial se le acabara el tiempo para ratificar el proyecto. Sin embargo, a las 23:10 los aliados lograron 114 votos para ratificar el Presupuesto 2024, Decreto 18-2023.
Fuente Prensa Comunitaria