
Noboa celebró la victoria ante sus seguidores destacando que los ecuatorianos han decidido «un camino de cambio» y criticó las acusaciones de su rival
En una jornada marcada por la polarización y el cansancio ciudadano frente a la delincuencia, los ecuatorianos reeligieron este domingo al presidente Daniel Noboa, joven empresario conservador, con un amplio margen de victoria sobre su rival, la abogada de izquierda Luisa González. Según el Consejo Nacional Electoral (CNE), con más del 92% de los votos escrutados, Noboa obtuvo un 55,8% frente al 44% de González, quien denunció un «fraude grotesco» y prometió solicitar un recuento.
Diana Atamaint, presidenta del CNE, calificó los resultados como una «tendencia irreversible». Noboa, heredero de una fortuna bananera, celebró la victoria ante sus seguidores, destacando que los ecuatorianos han decidido «un camino de cambio» y criticó las acusaciones de su rival. «Es vergonzoso que, con una diferencia de 11 o 12 puntos, cuestionen la voluntad del pueblo», afirmó.
Un país dividido entre la violencia y la esperanza
La reelección de Noboa se da en un contexto de alta preocupación ciudadana por la violencia relacionada con el narcotráfico, que ha azotado al país desde 2021. Tanto Noboa como González centraron sus campañas en promesas de mano dura contra el crimen, apoyo internacional y mayor equipamiento para las fuerzas del orden.
«No voté por Noboa, voté contra la inseguridad«, expresó Irene Valdez, jubilada de 67 años, mientras que Martín Constante, estudiante universitario de 19, defendió su voto por González: «Nuestro país necesita cambios, y Noboa no ha demostrado ser el líder que necesitamos».
Incidentes y anomalías electorales
La jornada electoral también estuvo marcada por denuncias de irregularidades. Atamaint confirmó la detención de varias personas por casos de votos duplicados y papeletas falsificadas. Además, 17 ciudadanos fueron sancionados por tomar fotografías de sus votos, una acción prohibida para prevenir la coacción de grupos criminales. A pesar de estos incidentes, la participación superó el 80%, en un país donde votar es obligatorio para los mayores de 18 años y menores de 65.
Con cuatro años por delante, Noboa enfrentará el reto de cumplir las expectativas generadas durante su campaña y mantener la estabilidad política en un país dividido. Según Grace Jaramillo, experta en la región andina, el resultado ofrece tranquilidad tanto a nivel interno como internacional. Sin embargo, las acusaciones de fraude y la resistencia de la oposición podrían complicar su mandato. «Los ecuatorianos han hablado, pero el desafío apenas comienza», concluyó Jaramillo.
Fuente: Euronews