
El equipo No. 1 de la nación del softball, las Texas Longhorns, empezó su camino hacia la Serie Mundial Universitaria Femenina con el pie derecho gracias a dos jugadoras y una de ellas es dominicana.
En el círculo, la derecha de tercer año Mac Morgan lanzó un no-hitter y se quedó a una bateadora de un juego perfecto rumbo al triunfo sobre Siena, 5-0, en el arranque de la Regional de Austin.
A la ofensiva por las Longhorns, la campocorto dominicano-estadounidense de segundo año, Viviana Martínez, conectando el único bambinazo del partido en el cuarto inning y se embasó en sus cuatro turnos al bate. Se fue 3-3 con un boleto gratis y dos empujadas, líder de Texas.
En su segundo partido del formato de doble eliminación, las primer sembradas Texas dominaron por 14-2 en cinco entradas a Northwestern, que había superado a Saint Francis (Pa.) por 7-2. Martínez se fue de 2-0 con una carrera anotada. La victoria en el círculo fue para Citlaly Gutiérrez, quien lanzó cuatro entradas, permitiendo 4 imparables, 2 carreras y 3 bases por bolas, ponchando a cuatro.
De esta manera, Texas avanza invicto para disputar el campeonato regional el domingo (1 p.m. ET), con la meta de asegurarse la localía en las Super Regionales. Su rival será Northwestern una vez más, ya que las Wildcats superaron a St. Francis por 5-1 luego de que el equipo de Pennsylvania había vencido a Siena 1-0.
En sus dos años en el equipo texano, Martínez ha dejado su huella. En 2023, fue selección unánime al Equipo All-Big 12 de Primer Año y estableció una marca con 52 impulsadas por más carreras remolcadas por una estudiante-atleta de primer año. Dividió su tiempo cubriendo la segunda base y el campocorto.
En 2024, Martínez pasó a defender el campocorto, que había sido su posición antes de la universidad, a tiempo completo. No sorprende cómo se adapta tan bien a los cambios. Ella dice que su mayor fortaleza en el campo es precisamente «mis ajustes que hago». Acredita la preparación mental que siempre hace.
Según Martínez, al bate le va muy bien contra las diferentes lanzadoras que enfrenta pues no se ve intimidada mientras que con el guante, sabe anticiparse a cualquier batazo que venga hacia ella. En 2024, lideró a Texas con 16 dobletes. Además fue colíder al haber sido golpeada cinco veces, estadística importante para su porcentaje de embasarse.
Vivi lleva el deporte en las venas. Su padre, Víctor Martínez fue pelotero, criado en la meca del béisbol dominicano, San Pedro de Macorís. Es la ciudad que ha dado más de 100 peloteros de Grandes Ligas, incluyendo a Fernando Tatis y Fernando Tatis Jr. y que dio el primer dominicano en ganar un premio de Jugador Más Valioso en Grandes Ligas, George Bell en 1987.
Víctor jugaría en la universidad en Texas y Arkansas y luego fue jugador de cuadro en las Ligas Menores, en el sistema de los Seattle Mariners en la segunda mitad de los años 1990. Como lo cuenta su hija, le transmitió su pasión por el deporte, «sus conocimientos y lo que aprendió jugando desde pequeño hasta las menores».
Víctor no solo le contó sus experiencias en el diamante, sino que llevaba a Vivi a jugar al parque desde que ella tenía seis años, ayudando a formar su excelente juego defensivo y ofensivo. Le proveía práctica de bateo y además tiraba pelotas para fildear. Dicen que la práctica hace la perfección. La consistencia de Vivi es la que siempre le inculcó su padre.
Vivi también heredó su amor por San Pedro de Macorís y por la República Dominicana. «Por eso escogí mi número 23, por ese código del área. Ves a Tatis Junior con ese número y a muchos de ellos con ese código. Adopté ese número por mi papá. Muchos piensan que es por el número de LeBron James, pero no lo es. Solo les digo que sí por salir del paso y más tarde les digo la verdad si me preguntan». (La cédula de identidad de cada persona contenía la serie correspondiente a su demarcación; la serie de la gente de San Pedro de Macorís era la 023.)
El año pasado, Martínez representó con gran orgullo a la selección de EEUU en la serie Japan All-Star 2023. Sin embargo, admite que sí ha pensado representar a República Dominicana en softball. «Sería increíble también vivir eso y jugar para ellos y representarlos. Lo he considerado», confiesa.
Añade Vivi, con una sonrisa, «(Mi papá) estaría tan emocionado. Lo ha mencionado antes y ha dicho que sería una experiencia genial y un momento increíble representarlos».
Texas ha sido el retrato de consistencia todo el año y la recompensa es haber sido seleccionados como primer sembrados en la postemporada por primera vez en la historia del programa.
Para finalizar temporada regular y comenzar el torneo de la conferencia Big 12, el equipo empató la tercera racha más larga del programa, 18 victorias consecutivas. Con una más, se coronarían campeonas de la conferencia, pero con un balde de agua fría llegó su gran rival Oklahoma. Las Sooners, tres veces campeonas defensoras nacionales, ganaron 5-1 para frenar la racha impresionante de Texas.
Martínez elogió el equipo completo que tiene Oklahoma en cuanto a pitcheo y fildeo y ve esa derrota como motivación, «Nos da hambre de regresar más adelante en la Serie Mundial o ,quién sabe cuándo, así que simplemente nos motiva para juegos más adelante».
Si alguien podría impedirle a las Sooners en su intento de ser el primer equipo en la historia en ganar cuatro campeonatos seguidos serían las Longhorns, que tienen un equipo igual de completo. Ostentan el promedio de bateo más alto de la nación y son segundas en carreras por partido, entrando a las regionales. ¿Cuál ha sido el secreto para llegar tan lejos, según Martínez? «Centrarnos en nosotras mismas y como equipo y seguir empujándonos las unas a las otros».
Las Longhorns cuentan con un cuerpo de lanzadoras sólido. Martínez alabó las herramientas de cada una de sus compañeras en el círculo: el rise ball y cambio de Teagan Kavan (17-2), el dropball/off-speed de Citlaly Gutiérrez (10-1), el dropball de Mac Morgan (13-1), la curva de la zurda Estelle Czech (8-3), el cambio y riseball de Sophia Simpson (0-0).
Reese Atwood ha sido la estrella al bate esta temporada. Fue seleccionada la Jugadora del Año de la Conferencia Big 12, con 86 carreras impulsadas y 12 jonrones. Según la dominicana-estadounidense, ver su dedicación y el esfuerzo adicional que invierte es lo que más inspira a las jugadoras en el vestuario a seguir su ejemplo.
Queda mucho camino por delante hasta llegar a la serie de campeonato de la Serie Mundial Universitaria Femenina, incluyendo las Super Regionales después de las Regionales. Sin embargo, Martínez espera poder enfrentar a sus eternas rivales, el No. 2 sembrado Oklahoma, para «obtener esa venganza y tomar esa derrota del fin de semana pasado y usarla como combustible y deseo para el campeonato, y con suerte, poder ganarlo». Y, por supuesto, hacer historia por las Longhorns en el proceso.
Fuente ESPN







