Que no se festine la reforma
En comparecencia pública de José Vila del Castillo, comisionado para los planes y estrategias para la transformación de la Policía, junto al ministro de Interior, Jesús Vásquez, se anunció un paquete de medidas para adelantar el proceso de reforma y salir al paso a las críticas por la brutalidad policial.
Se corre el riesgo, por tanto, de que por haberse precipitado acciones ya listas y que por alguna razón no se llevaron a la práctica, se venga abajo el esquema concebido y los aportes del Grupo de Trabajo por la Reforma y Transformación de la Policía Nacional.
Estamos de acuerdo con algunas medidas, como la de traspasar al Ministerio de Interior y Policía, la división de Asuntos Internos de la Policía, aunque se dice que es algo que no propuso el Grupo de Trabajo.
Además vemos con buenos ojos el hecho de que el director de la Policía Nacional, mayor general Eduardo Alberto Then, no haya participado en las ruedas de prensa del comisionado, por entender que esto podría generar ruidos negativos.
Lo que no vemos saludable, es poner en manos del aparato de publicidad y propaganda del Gobierno, las informaciones y comunicaciones provenientes de la Policía Nacional.
Por ventura, compensa en parte estas inquietudes y despeja un poco la incertidumbre la actuación diligente del Ministerio Público ante la atrocidad cometida en destacamentos como el de Naco contra David de los Santos, con la esperanza de que ocurra igual en los casos de José Gregorio en Ocoa y de Richard Báez en Santiago.
También resulta alentador el informe de la Inspectoría General de la Policía, que propone drásticas sanciones y retiro forzoso de los agentes policiales que estuvieron de servicio la noche que golpearon a David.
Ojalá y que muchas decisiones del día a día no se extravíen en la maraña burocrática de un ministerio y que no se festine la reforma, actuando por presión de sectores y de una oposición que cuando gobernó nunca le preocupó las malas actuaciones policiales y ahora para buscar votos aparecen satanizando al cuerpo del orden.