
(Los líderes del sionismo israelí y su socio mayor EEUU han sido derrotados)
Los conceptos emitidos en este artículo son de exclusiva responsabilidad de su autor
Por Héctor Miolán.
El Estado sionista de Israel luego de 77 años de haber sido fundado, como enclave del imperialismo norteamericano en Medio Oriente, acaba de perder su primera gran batalla de mano de la República Islámica de Irán.
Los sionistas venían muy envalentonados desde 1967 en la llamada guerra de los seis días del 5 hasta el 10 de junio de dicho año (donde obtuvieron una victoria geográfica y geopolítica, anexando: Los altos del Golán de Siria, Cisjordania de Jordania, Jerusalén Este, península del Sinaí, Franja de Gaza.
En 1973, 6 de octubre durante la guerra del Yom Kipur no les fue muy bien que digamos a los sionistas. Los países árabes les fueron bajando los sumos de la prepotencia, militarmente la superioridad de Israel fue disminuyendo. Arreciaron desde ahí con furia y rabia el golpeo sucesivo en contra del pueblo palestino, y a todas sus organizaciones de la resistencia.
Anteriormente el golpeo no sólo se reducía, tampoco se habían reducido los ataques salvajes en contra de los pueblos árabes, tal es el Líbano, Siria, etc.
La historia registra el salvaje genocidio de Sabra y Chatila en el Líbano cometido por el genocida Ariel Sharon y la colaboración del partido maronista cristiano y su falange, en 1982.
De ahí en adelante no pararon los crímenes, hasta que los mismos fueron reducidos luego de la creación de Hezbolá, organización islámica Chiita, que contó y aún hoy cuenta con la cooperación de la República Islámica de Irán. Esta organización contribuyó a dar un nuevo giro a la dinámica de abusos sobre los palestinos por parte del sionismo y sus instrumentos represivos como la FDI y el Mossad.
El 07 de octubre de 2023 cambia radicalmente todo el panorama en Palestina y todo Medio Oriente.
Ese día ha quedado marcado en la historia como el día más heroico de la resistencia Palestina y todo su pueblo; en particular de Gaza y su organización HAMAS, cuando ésta y otras organizaciones de la resistencia produjeron el ataque sorpresa sobre el ocupante sionista.
La tecnología del sionismo fracasó en casi toda su totalidad. La resistencia entró y se retiró con cientos de rehenes, aún hoy el ejército y su poderoso Mossad no ha podido liberar a todos los rehenes; y los que han logrado su liberación han sido por los acuerdos del cese al fuego entre el sionismo y la resistencia de una parte, de la otra por Qatar y Estado Unidos.
Es innegable, que, el sionismo furioso por su desmoralización frente a la resistencia Palestina, la cual no han podido vencer del todo, intensificará el genocidio; hecho éste calificado por expertos y analistas internacionales como el peor cometido hasta la actualidad sin ser superado por régimen alguno; llegándose a la conclusión de que han sobrepasado al holocausto producido no sólo en contra del pueblo judío, sino contra comunistas, gitanos, etc. de parte del nazismo y el hitlerismo.
La resistencia Palestina y la de todo el eje representado por Hezbolá, HAMAS, Siria e Irán han perdido grandes líderes como Hassan Nasralla de Hezbolá, Ismail Haniyeh y Yahya Sinwar de Hamas, y otros de mucha importancia. Todos esos han sido crímenes alevosos dentro de lo que los sionistas llaman golpes quirúrgicos, en los cuales han contado con la asistencia militar, económica y tecnológica de los imperialistas norteamericanos.
Sumado a estos, las vacilaciones y cooperación cobarde del mundo árabe; los cuales han venido poniendo por encima de su cultura y religión, sus intereses estratégicos y geopolíticos. Resultando esto en beneficios tácticos y estratégicos para Netanyahu y sus prohijados, cayéndose así, las máscaras de la hipocresía de esos regímenes en su mayoría monárquicos como los de Arabia Saudita, Qatar, Kuwait, Omán, etc.
Contrario a ellos, están los palestinos, los Hutíes en Yemen, organización ésta de raíces heroicas, por lo que pasarán a la historia como una de las organizaciones más anti-colonialistas de Medio Oriente.
La lucha no es en lo absoluto de tipo étnico religioso, sino esencialmente de corte anticolonialista y antiimperialista.
El 13 de junio del presente año el sionismo y su prepotente primer ministro Benjamín Netanyahu, su FDI, su Mossad, contando con la colaboración del encargado de Agencia Internacional de Energía Atómica (AIEA) Rafael Grossi, atacaron a Irán, mientras éste negociaba con Estados Unidos sobre los acuerdos nucleares.ç
Irán perdió cuadros científicos y militares; sobre todo de los Cuerpos de la Guardia Revolucionaria Islámica (CGRI). Un duro y gran golpe para el régimen iraní, no obstante, se repusieron de inmediato.
Ya es conocido que la ofensiva iraní no se hizo esperar, la operación militar (promesa verdadera III) fue lanzada de inmediato. Golpearon con sus misiles al corazón de Israel y territorios ocupados. Su Domo de hierro fue derrotado, sedes militares y de inteligencia fueron heridos en sus propias entrañas. Los bombardeos iraníes convirtieron a Israel en escombros.
Ya están evaluando desde el mismo ministerio de economía israelí, grandes pérdidas en miles de millones; eso, sin evaluar las pérdidas de instrumentos militares. Este informe, viene desde el propio gobierno sionista; y no de más nadie.
Trump y su prepotencia para salvar de una derrota militar total a Israel, atacó tres instalaciones nucleares iraníes: Fordow, Natanz y Isfahan, con el uso de su poderoso avión Espíritu B-52. Para destruir dichos centros usó poderosas bombas, sin lograr los propósitos esperados. Todos los analistas coinciden con el informe de las autoridades iraníes: no afectaron todos los centros porque los mismos fueron removidos a lugares seguros. Se concluyó que los daños sufridos se reparan en pocos meses.
Trump orondo se presentó luego, como el vencedor al obligar al supuesto cese al fuego entre Irán y el sionismo. J.Vance su vicepresidente habló de la Doctrina Trump; recibiendo burlas internas y externas.
El documento clasificado de inteligencia respecto al ataque no duró días, porque fue revelado y la revelación confirmó lo dicho por Irán sobre el poco o bajo daño producido en las plantas nucleares.
La desesperación por parte del sionismo ha llevado a Netanyahu y a su jefe de inteligencia del Mossad, David Barnea a hablar de manera inusual de la colaboración de Estados Unidos y su Agencia Central de inteligencia (CIA) en la pasada guerra de los 12 días, denominada así por Trump. Esa actitud liberal del jefe del Mossad nos dice, que la situación no anda muy bien al interior y exterior de Israel.
La táctica de Trump de supuestamente operar después de dos semanas y reducirla a pocos días no surtió los efectos del engaño. Esto le costó el ataque de Irán a su mayor base del Medio Oriente situada en Al Udeid, Qatar.
El cese al fuego no se puede decir que se ha cristalizado; porque la venganza del sionismo y sus patrocinadores está latente. De no llevarse a cabo ninguna venganza de parte del sionismo; entonces la historia registrará una mayor derrota, sumada a las derrotas morales que vienen sufriendo desde el Yom Kipur de 1973.
Hay que señalar con toda propiedad que esa guerra de 1973 significó el comienzo del declive del sionismo en la región. Creciendo más y más la derrota del mito de la invencibilidad del sionismo.
Las mentiras como tácticas en esta época tecnológica no duran mucho. A Trump y sus dependencias civiles y militares, se le diluyen en el aire sus manipulaciones. Está tan desesperado, que al interior de su gobierno le contradicen, tal es el caso de republicanos que no están con la guerra, al igual que demócratas; pero no nos engañemos son contradicciones que las pueden resolver para sostener su poder; el cual no beneficia al pueblo norteamericano y sus trabajadores; ni decir del sionismo, el hervidero es grande, pero no se vislumbra la derrota de Netanyahu y sus ministros genocidas.
Ante éste fenómeno de guerras en Medio Oriente, los revolucionarios dominicanos deben estar atentos a los giros que van tomando las guerras en el mundo, tanto en Europa, Asia, América Latina, etc. porque las mismas afectarán las economías de la región caribeña, y en particular el “paraíso” de la permisividad en lo que han convertido a la República Dominicana.