
Estados Unidos no tiene planes de retirar sus tropas de Siria, informó un funcionario del Departamento de Estado.
La Casa Blanca tiene alrededor de 900 soldados en el este de la nación levantina y respalda a las milicia separatista Fuerzas Democráticas de Siria (FDS) lideradas por los kurdos, lo que le permite controlar, aproximadamente, un tercio del territorio.
Washington afirma que su permanencia tiene como objetivo combatir los restos del grupo terrorista Estado Islámico, aunque el gobierno sirio afirma que la presencia estadounidense tiene como propósito controlar los recursos petrolíferos.
También forma parte de la campaña económica contra Damasco, que incluye sanciones paralizantes «diseñadas específicamente para impedir la reconstrucción del país», según el gobierno sirio.
El subsecretario adjunto de Estado para Asuntos del Cercano Oriente Ethan A. Goldrich, expresó que Estados Unidos no abandonaría Siria «hasta completar su misión”, refiriéndose a las operaciones contra ISIS.
“No tenemos intención de retirarnos de Siria. Tenemos intención de continuar y completar nuestra misión para impedir el resurgimiento del ISIS y contrarrestarlo; y trabajar con nuestros socios”, informó Goldrich.
Goldrich reiteró la oposición de Estados Unidos a que los países de la región normalicen sus relaciones con Damasco.
A principios de este año, algunos informes sugirieron que Washington estaba considerando una retirada de Siria, pero las FDS dijeron más tarde que habían recibido garantías norteamericanas de que sus fuerzas permanecerían allí.
Estados Unidos inició conversaciones con Irak sobre una posible retirada este año, pero no hay señales de ningún avance en esa dirección.
La nación norteña tiene unos 2500 soldados en Irak que apoyan a los estadounidenses en Siria.
Las tropas en ambos países podrían ser un posible detonante para una guerra más amplia en medio de las escaladas regionales, resultado de la guerra israelí en Gaza.
Fuente Al Mayadeen