Turquía, Bulgaria y Rumanía han firmado un acuerdo para mejorar la colaboración en las labores de desminado marítimo en el mar Negro. Así lo anunció en rueda de prensa el ministro turco de Defensa, Yaşar Güler, quien destacó que resulta de «vital importancia estar protegidos ante los peligros que puede provocar la guerra«, en la zona. Las minas, depositadas por la Armada rusa a lo largo de la costa ucraniana, desde que comenzó su invasión de Ucrania en febrero de 2022, representan un grave peligro.
El acuerdo entre las autoridades turcas, búlgaras y rumanas, se produce después de que Ankara negase la semana pasada el acceso al mar Negro, a los dragaminas donados por el Reino Unido a Ucrania.
En febrero de 2022, apenas comenzada la guerra que se libra en Ucrania, Turquía promulgó la Convención de Montreux de 1936 para impedir el paso de buques de Rusia o ucranianos por los estrechos del Bósforo y los Dardanelos. Así, pidió a los países cuyo territorio no limite con el mar Negro que no enviaran buques de guerra. Moscú y Kiev intercambiaron acusaciones de responsabilidad por las minas, que permanecen a la deriva, en las aguas marítimas.
Fuente Euronews