Las voces de los gazatíes aún con vida en el campo de refugiados de Jabalia se apagan. Durante la última semana, cientos de palestinos, alrededor de 200, han muerto debido al asedio de las tropas israelíes por tierra y aire desde principios de este mes. Otros cientos de miles de residentes civiles están atrapados o han recibido la orden de huir en medio de intensos bombardeos y fuego de artillería constante, mientras los cadáveres de sus vecinos se pudren en las calles. Lo que está sucediendo ahora en el norte de Gaza es un genocidio dentro del genocidio, ha denunciado el embajador palestino Majed Bamya, observador permanente adjunto ante Naciones Unidas, en X.
Además, los aviones israelíes continúan bombardeando el Líbano y atacando zonas civiles fuera de los bastiones tradicionales de la milicia Hizbulá. Al menos 37 personas han muerto y 37 han resultado heridas en ataques contra el centro y el norte libanes. En su guerra contra el presente y el pasado, Israel ha atacado una mezquita de 100 años de antigüedad en la localidad fronteriza de Kfar Tibet y ha quedado completamente destruida, según la Agencia Nacional de Noticias. También a lo largo de la noche en Nabatieh, la principal ciudad sureña de interior, un ataque al histórico zoco ha causado varias muertes y un incendio, de acuerdo a la Cruz Roja Libanesa. El enorme incendio posterior ha impedido retirar a supervivientes de la agresión.
Otro ataque a FPNUL
Unos 25 soldados israelíes heridos han sido trasladados en helicóptero a un hospital en el norte del país tras participar en feroces batallas con Hizbulá mientras continúa la invasión terrestre. Después de dos días de ataques continuados contra las tropas de la misión de paz de Naciones Unidas presente en la frontera, que han herido cinco heridos, el primer ministro israelí, Binyamín Netanyahu, ha lanzado un mensaje al secretario general de la ONU, Antonio Guterres, en un vídeo en hebreo. Es hora de que retiren la FPNUL de los bastiones de Hizbulá y de las zonas de combate, ha exigido. Las Fuerzas de Defensa de Israel el Ejército israelí lo han solicitado en repetidas ocasiones y se han encontrado con reiteradas negativas, todas ellas con el objetivo de proporcionar un escudo humano a los terroristas de Hizbulá, ha añadido.
La FPNUL ha denunciado la incursión este domingo de madrugada de soldados israelíes en la posición de la ONU de la Línea Azul a la altura de Ramyah. Alrededor de las 4:30 a.m., mientras los soldados de paz se encontraban en refugios, dos tanques Merkava israelíes destruyeron la puerta principal de la posición y entraron a la fuerza en ella, han explicado en un comunicado. Dos horas después, los efectivos de mantenimiento de la paz que se encontraban en la misma posición informaron de varios disparos a 100 metros al norte, que emitieron humo, han añadido. Quince efectivos sufrieron efectos, como irritación cutánea y reacciones gastrointestinales, después de que el humo entrara en el campamento, han explicado. La administración del presidente de EEUU, Joe Biden, ha pedido a su aliado Netanyahu que dejara de atacar a los cascos azules.
Sin comida en el norte de Gaza
A su vez, este domingo las autoridades militares hebreas han pedido a la ciudadanía de otras 23 aldeas del sur del Líbano que las evacúen porque van a ser atacadas. La intensificación de la campaña de bombardeos israelíes iniciada hace tres semanas ya ha provocado el mayor movimiento de desplazados de la historia del país de los cedros, con 1,2 millones de personas expulsadas de sus casas de una población de 5,3 millones. Hace dos días la división de derechos humanos de la ONU denunció que una cuarta parte del territorio libanés se encuentra ahora bajo órdenes de desplazamiento militar israelí.
Mientras, en Gaza, el sufrimiento no se detiene. Incluso, se multiplica, especialmente en el norte del enclave. El ejército israelí continúa atacando el norte de Gaza y está intentando transformarlo en un espacio exclusivamente genocida, ha dicho Ismail al Thawarta, jefe de la Oficina de Medios del Gobierno de Gaza, que ha acusado a las fuerzas israelíes de impedir que los rescatistas ayuden a las víctimas de los ataques. Además, el Programa Mundial de Alimentos de la ONU afirma que este mes no ha entrado ningún alimento en el norte de la Franja de Gaza, a medida que continúan los ataques israelíes, haciendo que el riesgo de hambruna sea real para los aproximadamente 400.000 palestinos atrapados allí.
Fuente EL PERIÓDICO