
Por Franklin Domínguez Cruz
Estudiando la pirámide social de la resiliencia haitiana, el sociólogo Emund Paul, el publicista Alcius Chartman haitianos, entre varios profesionales e intelectuales, le llamaron
«La República al revés»
¿Por que? Porque, para enderezarla es decir; para colocar a la mayoría en el puesto que le corresponde han luchado numerosos patriotas haitianos.
Principalmente sus publicistas y escritores y no pocos hombres de estado que se han identificado con intereses de la raza negra, explotada por los colonos franceses y luego por mulatos y por el propio, Presidente Pedro Boyer autor del famoso código rural de 1826.
Y lo más profeso de utilizar en las más altas esferas de la administración pública, a los hombres de color, que a lo de pura raza africana»
Escribo sobre que «Haití se encuentra en una situación invertida»
Por ese precedente determinaron que:
Todo lo mejor lo posee la minoría, la mayoría está en la absoluta miseria, ignorancia y primitivismo.
La clase mestiza dirige la política y la blanca la economía, de ahí se origina el rechazo de que; cada vez que sube un grupo es enfrentado por otro, las miles tribus que convivían en el África ardiente, pero que llegaban siendo adversarios como esclavos de los franceses.
Esto motivó al doctor Joaquín Antonio Balaguer Ricardo, (gran estadista dominicano) a escribir sobre la historiografía de la isla de Santo Domingo de Guzmán, sobre; Sociología, Estadística y Sanidad, amparado en los padres de la historia dominicana y haitiana, José Gabriel García y Jean Price Marc respectivamente.
Al presidente Balaguer Ricardo, lo conocí en mi municipio Restauración, en el 1968 (tenía 9 años) cuando mi padre Gerardo Domínguez Fernández, a la sazón era alcalde del municipio.
El doctor Balaguer, llegó en su helicóptero rojo, se desmontó y se dirigio directamente donde mi padre, que lo recibía con la gente detrás, venía a tratar el asunto de «La Alianza para el Progreso» los alimentos que llegaron luego al pueblo: macarela, queso, aceite, arroz.
Balaguer extendió la mano a mi padre y yo que estaba en sus piernas, le pasé la mia y él sorprendido, la agarró, me miró y me puso la mano en la cabeza y dijo » este va a ser grande».
Obviamente le llevo dos pulgadas a mi padre, y a los 22 años de su gobierno. «El Ito» hermano de La Ita, me metió preso en Santiago.
Mi primer artículo de prensa, tenía que ser explosivo y me costó la cárcel, con todos los cuentos que metieron para desacreditarme, no obstante; Peña Gómez, Ambioris Días Estrella y líderes del P.R.D., apoyaron mi diafanidad y mi talento.
La nota se llamó «El Gran Día del 92» en los periódicos: La información, última Hora y la Noticia.
Dicho artículo enviaba un «meta mensaje» al Papa que venía (a la celebración de los 500 años del descubrimiento del nuevo mundo)
Yo pedía con todo mi atrevimiento que el Papa Juan Pablo Segundo, fuera secuestrado «simbólicamente» en un búnker dentro del «Faro a Colón» con el reclamo que se pagaran todas las injusticias realizadas contra el genocidio de la raza indígena y africana, en nuestra América.
Cuando fui a quejarme al director del periódico la información, luego fué fundador de «Diario Libre» (f) me dijo «dichoso tú que está vivo»
«Haití y el destino dominicano»
Lo primero que destaca el doctor Balaguer, es el estado sanitario del país desde 1844 con la sorda rivalidades que existían con los planes anexionista de «la Junta Central Gubernativa» creada a raíz de la proclamación de la independencia.
Muchos dominicanos preferían abandonar la isla por su inestabilidad, querían instalarse en: Venezuela, Cuba o Puerto Rico.
Las constantes incursiones de los expansionistas haitianos mantenían en zozobras a los dominicanos.
Duarte el Padre de la Patria y los demás próceres Trinitarios, se enfrentaban a Pedro Santana y sus parciales, la naciente República quedaba dividida en dos facciones, una por la independencia absoluta, los otros la anexionista.
No obstante; en el país nunca se ocuparon de la situación sanitaria de los servicios de salud y de educación solo ocurrió a raíz de la intervención norteamericana.
Los Estadounidenses, U.S.A., crearon el Departamento de Sanidad, por Orden Ejecutiva, # 338, del 18 de octubre del año 1919.
El intento de Ramón Cáceres en 1908, se quedó entre; (un Organismo Académico) dirigido por Catedráticos.
Igualmente, ocurrió en 1912 se quedó en manos de teóricos.
El ilustre escritor José Ramón López,
pública «La alimentación y las razas» un cuadro lastimoso de la población rural y la mortalidad entre los pobres de la ciudad, por la escasez y la deficiencia de los servicios de beneficencia pública.
Pedro Santana Familia, logró por «un risible título de: Marqués de las Carreras» anexar a la República Dominicana, como provincia de España.
El esfuerzo de los nacionales con (el grito de Capotillo) restablece con el Patriota Ignorado, designado el 8 de marzo en «la convención de los almácigos» como: Jefe de la Revolución, el Coronel Santiago Rodríguez» alcanza de nuevo la Independencia por la Restauración, qué es considerada: La Segunda República.16-8-1863.
162 años después hoy, la proclamamos para que cada dominicano recuerde tal hazaña.
La desnacionalización de la frontera, que había sido invadida por costumbres exóticas en la zona próxima a Haití, que conspiraban con el sentimiento religioso dominicano, el vudú es una práctica ritual importada por los esclavos de Dahomey una manifestación típica del animismo africano.
Toussaint Luverture, quien fue considerado como «un maestro de acción» advertía sobre el peligro que representaba para el país la propagación del vudú y demás ritos de la misma procedencia.
Louvertur, enemigo de las supersticiones, consideraba como un insulto a Dios y un regreso a la barbarie.
Por segunda vez publicó una ordenanza en la cual prohibía el vudú, porque conspiraba contra el desarrollo de la agricultura haitiana.
Ya anteriormente en el año 1791, se utilizó el vudú, durante la concentración del Gran Caimán.
Fue Boukman, un Jamaiquino que se unió a las huestes de Toussaint, quien pese a su oposición a esta práctica espiritista, la favoreció para impulsar a los esclavos a la rebelión contra sus explotadores franceses, apelando a ese rito, para excitar a los hombres de su raza para la revuelta del 22 de agosto.
Este llamado en toda la zona del Norte, redujo a escombros las plantaciones y el exterminio a la mayoría de sus dueños.
No es reciente el empeño de Haití, por corromper el sentimiento religioso del pueblo dominicano. Juan Pablo Duarte, agrega en su campaña secreta, el afán de que nuestra augusta religión no desaparezca, de ahí nace el lema: Dios, Patria y Libertad.
En en algunos escenarios de la historia han aparecido los intelectuales haitianos- afrancesados, donde la mayoría huyendo de las tropelías de los negros, se instalaron en la frontera dominicana, casi la mitad de los apellidos de Dajabón, son de origen francés.
Cuando un revolucionario abogado llamado Freddy prestol Castillo, que escribe la historia novelada «El masacre se pasa a pie» Freddy Prestol es de origen frances, y crea una promoción perversa de los haitianos, para recordarnos el acontecimiento de 1937, cuando el escenario de esas acciones, nunca ocurrieron en el río dajabón, si no; en las inmediaciones de: La Luisa hoy Manuel Bueno, Gurabo hoy Restauración, el Pino, Castellar, Loma de Cabrera, el Corte, Sombrero, Algodones y Capotillo.
Según narra la historia el río Rebút, era el río Guayubín, donde se enfrentaban españoles y franceses, en esos enfrentamientos corría mucho la sangre y le decían el río de los pleitos Rebút en francés, desde allí el río manaba sangre.
Los gobiernos de República Dominicana, desde los años 1935 al 40, se prohibieron el bautizo de los dominicanos en Haití, aunque; en el pasado los haitianos, en sus ocupaciones saqueaban a las iglesias, conventos y lo convertían en cuarteles militares.
Además; le suprimieron todo derecho que disponían los ministros del culto católico.
¡Ojalá mejoren y le lleven a los sacerdotes, la suprema conciencia de no venderse a la consideración de los haitianos, quienes manipulan con sus intenciones maliciosas, contra las iglesias que operan en la frontera.
El vudú es la religión oficial de Haití, pero además; es su armamento político que aumenta con su misticismo doctrinario, un aumento poderoso para mover las masas, las diferentes etnias conocen por la experiencia el
poder que le suministra, en la historica misión que le impuso el sacerdote Boukman, que luchó y surgió para lanzar los esclavos contra sus opresores.
La maldición de los rayanos.
Por el hecho de que Haití, en el pasado tenía una mejor economía que la Dominicana, el rayano hijo de ambos países, prefería el lado haitiano y su complicidad. Todavía existe, el rayanos, aunque ahora; se favorece del lado dominicano por su economía mejorada.
¡Eso es verdad! lo digo por el empeño personal, por preservar la frontera, en especial sus límites y tratados de fronteras, pero que la mayoría, hace oídos sordos, en vez de auxiliar y ser como el estadista: Joaquín Balaguer o como el fronterizo Mariano Cestero, el Prócer Ángel Miolán o Eugenio Belliard, Duvergé o Bosch, Vincho Castillo y Trujillo.
Otros que hoy hacen mutis, son: las asociaciónes de empresarios, ganaderos, arroceros y comerciantes que se han enriquecido, negociando, sin pagar los impuestos al Estado, sin apostar al desarrollo de nuestra zona límites.
Los hijos de la línea fronteriza, han abandonado las zonas y han llegado, los beneficiarios que son: los dueños del contrabando, narcotráfico abigeato, trata de blanca y negocios militares.
Por medio del Empresariado Nacional, que no cree en Patria, ni Nacionalismo.
La conclusión de esta » Isla al revés y de la República al revés» es determinar una sola República Dominicana de Haití.
Cómo decir casi: misión imposible, ante un pueblo en disolución con culto e historia sólida y dispuesto a llevar hasta las últimas consecuencias del sueño de los patriotas dominicanos: Juan Sánchez Ramírez ,José Núñez de Cáceres, Juan Pablo Duarte, Santiago Rodríguez, Rafael Tomás Fernández Domínguez, estos fueron los padres creadores de jardines floridos para pisar con energía el territorio dominicano. ¡viva la patria carajo!
La propuesta:
1- El rechazo del Dominicano al Haitiano, nunca ha sido mayormente por racismo, si no; es debido según Jean Price Marc, porque existía un sentimiento de antipatía hacia Haití, de parte del dominicano, sin dudas; debido a las atrocidades cometidas por Tussaint Loverture y Jean J. Dessalinne, que en sus invasiones de los años de 1801- 1806 fueron quiénes cometieron, los peores crímenes a los franceses, que habitaban en la parte norte de la isla.
También los historiadores, citan: de que el haitiano constituía una raza inferior, no acta por su precario grado de civilización y la supuesta barbarie y costumbre de África.
Los Dominicanos desde las guerras de 1843 a 1856, consideraron a la soldadesca haitiana, de haber jugado «con un triste talante, que no son hombres para abatirse con nosotros» eso lo dijo un miembro de la milicia dominicana Domingo Mayoll, quienes con otros soldados decían: «que el guardia haitiano, cuando veían la sangre se desmayaba y en la fila sufrían desmayos.
Haití tiene ciudadanos, hombres de alto nivel académico, cultivando grandes figuras de la diplomacia, con alta ilustración europea, tales como: el presidente Salomón, Luis Bornó, quien firmó el tratado de frontera con Horacio Vázquez en 1929 y Eugene Roy, sin embargo; ellos no transmitían ese interés en el pueblo analfabeto y rural.
solo un presidente dictador que caló en el sentimiento nacional, atrapando el vudú como su estandarte, fue Jean Clo Duvalier, quien era médico, brujo y un gran sociólogo.
3- El Noroeste Dominicano, en el tratado de límite de 1929 y su protocolo adicional de 1936, es lo que define la compartición de la isla de Santo Domingo de Guzmán, este nombre fue adquirido en 1795 con «el tratado de Basilea»
Daniel Fignole, autor de un opúsculo escrito en 1948 titulado «del Noroeste Dominicano» quien sostenía que el territorio de la parte de Haití, debe de comprender desde: Dajabón, Montecristi, Guayubin y Banica por el Sur.
Contrario a esto Don Carlos Sánchez y Sánchez, junto a catedráticos del derecho internacional de la más antigua Universidad Autónoma de Santo Domingo U.A.S.D., entendían «que la cuestión haitiana, debe resolverse con el establecimiento de un control internacional que equivaldría a la disolución de Haití, como Estado independiente»
«Haití no puede alcanzar con la propuesta de 1948 la similitud existente en Utah y Arizona y los Dominicanos, para nada; nos interesa la disolución haitiana en cambio: que se resuelvan, sus odios y raciocinio para hacer un país posible»
La disolución de Haití, puede resolverse con el apoyo de las Naciones Unidas ONU. OEA. BRIDS y todos los Organismos que potencializan el Mundo Civilizado.
La capacidad de desarrollo de la humanidad en su civilización puede hacer esta Isla funcional, pero sin agredir a lo que es; el sentimiento de nación, de un grupo de gente que logró sobrevivir a una situación difícil en una isla tan convulsa.
Contra- propuesta de los Dominicanos: Mantener incólume los principios básicos de «Los Trinitarios». Manejarnos Unidos, evitando: La Corrupción y manteniendo los niveles de desarrollo y prosperidad en la República Dominicana, con Democracia y Libertad. Asegurarnos de un servicio de seguridad Nacional con Fortaleza y Disciplina..
Lema «La República Dominicana será libre e independiente, de toda potencia extranjera o se hundirá la isla». Juan Pablo Duarte.
F.D.C.* 2025.
*Bibliografía:
Historia de Santo Domingo José Gabriel García. 8va Edicion
Historia de la isla de Santo Domingo Jean Price Marc. 4ta edición.
La isla la al revés. Haití y el destino dominicano. Joaquín Balaguer .
13.aVa. edición.