POR CARLOS HENRIQUEZ
HERMANAS MIRABAL
Decía Jean de la Fountaine, ese famoso fabulista francés, autor de una serie de importantes obras, entre ellas cuentos, novelas y más, que “Cualquier poder si no se basa en la unión, es débil”, y es precisamente la profundización de la unidad, lo que a nuestro entender se debe cultivar a lo interno de nuestro Partido Revolucionario Moderno (PRM) si de verdad sus dirigencias, tanto la alta, la media como los de las bases, desean continuar en el poder más allá del 2024.
A nuestro entender se debe continuar trillando este camino que se ha iniciado con la ratificación de los compañeros Carolina Mejía y José Ignacio Paliza al frente de nuestra institucionalidad, como única garantía suprema de cara al 24, claro está, con la figura primaria del Presidente Luís Abinader, quien es por hoy, quien ostenta el más alto liderazgo político-nacional.
Sin embargo, y es algo que se debe de considerar como un grito de alerta, no solo de la base de nuestra organización, sino de todo el conglomerado que a lo interno del PRM buscan sus diversos espacios, como es la responsabilidad que tiene cada individuo para la continuación más allá del 2024, de un partido que como el nuestro, hoy por hoy representa de las manos de las presentes autoridades, la prolongación del desarrollo de un país, que como el nuestro, no amerita ni una pulgada de retroceso.
Tanto los perremeistas como los diversos sectores nacionales, entre ellos los empresariales y otros que de manera directa o indirecta gravitan en el desarrollo de la nación, no debemos olvidar, que durante varios años el país estuvo secuestrado por agentes que en sus momentos se creyeron como los amos y señores de esta media isla quisqueyana.
Como gobierno, como políticos y como entes que trabajamos para el desarrollo de nuestra nación, debemos tomar como ejemplo, las imágenes y los grandes titulares de los diversos medios de comunicación, en donde las serias acusaciones y los casos que se ventilan en la justicia, han sido desde hace más de un año, sus noticias principales.
Esos grandes titulares, más que todo, son bochornosos; y a los que debemos tomar como referentes, para que cuando sea a otro partido al que le toque las riendas del poder, continuar con la cabeza erguida y así, quienes hoy ocupan posiciones de primer o segundo orden dentro del tren gubernamental, no pasen por la ignominia como la que hoy enfrentan quienes son acusados de corrupción.
¡Pero bien…!, las breves reflexiones de las líneas anteriores, podrían ser sujetos de análisis en otra ocasión, mientras tanto, el tema que nos ocupa en estos momentos, es reiterar nuestro llamado a la unidad para la conformación de nuestras autoridades en las diferentes localidades del país.
Como expresáramos al inicio de este artículo, debemos tomar como ejemplo, las negociaciones y decisiones a las que nuestra cúpula dirigencial llegó, con lo que se nos ha mandado «aquí abajo» el mensaje de que todo puede ser posible para la continuación del fortalecimiento de un partido que como el nuestro ha abrazado desde su fundación el ideal supremo de servirle a la patria.
Nuestra organización y de acuerdo a lo que las grande mayorías nacionales hemos venido observando, según va pasando el tiempo adquiere madurez, y sobre todo, da a nuestra sociedad un ejemplo muy palpable de que cuando se quiere se puede, y en esa sintonía es que debemos todos trabajar si de verdad queremos continuar desarrollando la patria de Duarte, Sánchez, Mella, Luperón y de nuestro inolvidable líder, el doctor José Francisco Peña Gómez.
Por ejemplo, en nuestra provincia Hermanas Mirabal (y es lo que resalto y tomo como segundo ejemplo dentro de este análisis), nuestros dirigentes, comenzando por el llamado «Timonel » de la política, Domingo Adames, junto a Freddy Fernández, Elido Pérez, Mayreni Corniel, Mercedes Ortiz, los hermanos Félix y Breinlyn Hiciano así como un servidor y otros tantos que por razones de espacio no podremos mencionar, hemos estado trabajando de cara a la unificación de todos los sectores.
El arduo trabajo que se viene haciendo desde el Comité Ejecutivo Provincial, ha fortalecido aun más los preceptos y los deseos tanto de nuestro Presidente Luis Abinader como los de nuestra cúpula nacional, para de esta manera, cuando ya “la casa esté en completo orden” salir dispuesto a dar la batalla a nuestros adversarios, pero sobre todo, a presentarle no solo a nuestra demarcación geográfica y al país un PRM, el cual desde este pedacito del país, les hemos cogido las señas, a nuestra secretaria general y a nuestro presidente institucional, los compañero Carolina Mejía y José Ignacio Paliza.
Si nuestros dirigentes medios utilizan la inteligencia política y su sentido emocional, es total y cien por ciento seguro, que en cada una de nuestras provincias, municipios, campos y lomas, se construirá la sólida unidad que sellará la victoria electoral del PRM y de nuestro Presidente Abinader.
De lo contrario, si abandonamos nuestra vocación de poder de cara a lo que es el desarrollo integral de nuestro país, entonces si, como dice la famosa canción cristiana de Gregorio Javier, el camino vía la permanencia en el poder del PRM, podría tornarse muy difícil para la consumación del programa establecido por nuestro Presidente Abinader, algo sumamente lamentable y que podría llevarnos a la oposición.
De manera pues, que estamos en un estelar momento, en donde en cada una de nuestras ciudades, la dirigencia en pleno del PRM tendrá que (repetimos), tomar como ejemplo las sabias decisiones de los de allá arriba, para de esta manera y sin temor alguno, una vez más en el 24, juramentar a quien hoy por hoy se ha constituido en un referente de trabajo a favor de los mejores intereses del país, como lo es nuestro Presidente Luis Rodolfo Abinader Corona.
El autor es Ingeniero Civil y dirigente del PRM en Salcedo