
Por Mary Ann Brito, Psicóloga clínica y escolar
Según informes de la OMS, (2017), en la República Dominicana un 5.7% de la población sufre de trastornos de ansiedad, a raíz de la pandemia del COVID-19 este porcentaje se ha disparado y hoy en día este trastorno se ha convertido en uno de los problemas de salud mental más demandados por la población dominicana en las consultas psicológicas.
Es necesario que los profesionales de la salud mental y autoridades locales entiendan que esta problemática, una emergencia nacional.
La ansiedad es un sentimiento de miedo o temor excesivo ante algo específico o desconocido.
Se manifiesta de distintas maneras, la más común es a través de sensaciones físicas como: Molestia toráxica, estomacal, náuseas, taquicardia, nerviosismo, sudoración, sensación de falta de aire, miedo a morir o a sufrir un desmayo.
Estás sintomatologías si no se gestionan adecuadamente pueden desencadenar un ataque de pánico.
El ataque de pánico es un episodio repentino de miedo intenso acompañado de síntomas físicos basado en un peligro aparente y no inminente.
Existen varias acciones que lo pueden prevenir.
1. Uso de la respiración profunda.
2. Practicar la conciencia plena Mindfulness (meditación).
3. Sumergir tu rostro en un ball de agua fría.
4. Cuando estés ansioso rompe el ciclo, sumérgete en algún pasatiempo.
Siempre es recomendable llevar un estilo de vida saludable como el hacer ejercicio, ya que, esto ayuda a segregar cortisol que es la hormona del estrés, tener una adecuada alimentación, evitar el consumo de alcohol y sustancias ilícitas y hacer del sueño una prioridad. También se debe evitar la procrastinación, pues esto aumenta la probabilidad de que te sientas ansioso.
Una herramienta letal para la ansiedad es conocerla, ponerla en evidencia; Hacer consciencia de que se trata de un trastorno que tiene un inicio y un final, que cuenta con un trasfondo que hay que trabajar para descubrir. Que puede que tenga síntomas muy molestos, pero estos jamás van a desencadenar un problema físico mayor que pueda incluso, causar la muerte.
Cuando el ser humano no se siente en control de ciertas situaciones o siente incertidumbre se dispara una alarma que activa nuestro sistema nervioso central, cuando finalmente se le quita la máscara a la ansiedad se le empieza a perder el miedo y la probabilidad de que ocurra un ataque de pánico es menor, pues, es justamente esa incertidumbre lo que causa el desequilibrio.
Cuando se habla del tratamiento del trastorno de ansiedad se reconoce que los principales son la psicoterapia y los medicamentos. Sin embargo, la actitud que tomes es elemental. Un tratamiento sin esfuerzo personal es fallido al 100%.
La preocupación no elimina el dolor del mañana, sino que elimina la fuerza del hoy. Te invito a vivir en el aquí y el ahora porque la ansiedad no está en el presente sino en el futuro. Respira lentamente porque esta será tu ancla… No hará que la tormenta se vaya, pero te mantendrá firme hasta que pase.
Reconoce tu ansiedad, edúcate y trabájala.
La autora es miembro de CODOPSI, filial San Francisco de Macorís.
Fuente: Jaya