
Marruecos ha vuelto a pedir una vez más al Fondo Monetario Internacional (FMI) una nuevo préstamo de 5.000 millones de dólares, según informó el organismo internacional, que añadió que la directora general del FMI, Kristalina Georgieva, tiene la intención de «recomendar la aprobación» de este quinto préstamo. En su comunicado, el FMI explica que esta línea de crédito flexible (LCF) ayuda a los países a protegerse «contra los choques externos mediante la adopción de políticas económicas muy sólidas y estableciendo un balance de buenos resultados económicos, gracias a un acceso considerable e inmediato a los recursos del FMI sin condiciones a posteriori». El FMI dice que las autoridades marroquíes van a usar ese nuevo préstamo como «un dispositivo de precaución». Es el quinto préstamo que pide Marruecos en menos de dos años. En abril de 2020, Marruecos usó una Línea de Precaución y Liquidez (LPL) por valor de 3.000 millones de dólares del FMI que había sido aprobada en 2012 y supuso, entonces, una bocanada de oxígeno para las finanzas del país a la hora de afrontar los efectos de la crisis de COVID-19.
A finales de 2021, el FMI otorgó una asignación general de derechos especiales de giro de 650 mil millones de dólares a sus países miembros para aumentar la liquidez en aquella época de crisis. Marruecos, país miembro del FMI con una cuota del 0,19%, recibió entonces 1.200 millones de dólares, o 10.500 millones de dirhams (moneda nacional). Esta asignación permitió a Marruecos fortalecer sus reservas de divisas a un nivel de 328,5 mil millones de dirhams hasta fines del mismo año, según las previsiones del Banco Central.
Fuente: Resumen Latinoamericano