
Cuatro personas resultaron asesinadas en la finca San Luis, perteneciente al resguardo indígena de López Adentro, en la zona rural de Caloto, en el departamento Cauca, Colombia, reportó el Instituto para el Desarrollo y la Paz (Indepaz).
Según el consejero mayor del Consejo Regional Indígena Cauca, Yesid Conda, “los cuerpos de los cuatro hombres tenían heridas por arma de fuego y había dos cuerpos que tenían sus manos atadas”.
Aún no se precisa la identidad de las víctimas de esta masacre; sin embargo, se reporta que “no son del territorio indígena”, indicó.
Este hecho enciende las alarmas, ya que las comunidades temen que constituya una violación al cese al fuego acordado entre el Gobierno y las disidencias de las Farc.
En tanto, horas después del hallazgo de los cuerpos, dos vehículos fueron incinerados en la vía que conecta Caloto con El Palo. Se desconoce la causa y si podría estar ligado con los asesinatos.
Los residentes de la localidad esperan respuestas y la pronta identificación de los culpables de dichos actos violentos en la región.
De acuerdo con Indepaz con esta nueva matanza suman 73 masacres registradas en Colombia a lo largo del año 2023.
Asesinato de lideresa social en Putumayo

El Instituto de Estudios para el Desarrollo y la Paz (Indepaz) de Colombia denunció el asesinato de la lideresa social, Yamili Bernal, en el departamento de Putumayo, al suroeste de esa nación.
“Yamili Bernal era una reconocida lideresa y actual presidenta de la Junta de Acción Comunal -JAC- de la vereda Santa Rosa de Juanambu jurisdicción del corregimiento de Puerto Umbría en el municipio de Villagarzón, Putumayo”, refirió el ente colombiano.
Indepaz puntualizó que Bernal fue asesinada en horas de la noche por hombres armados que llegaron al establecimiento donde se encontraba y la atacaron, con lo que suman 1550 líderes y lideresas asesinadas desde la firma del Acuerdo de Paz, en noviembre de 2016.
En este sentido la Defensoría del Pueblo emitió la Alerta Temprana (AT) 008/23, así como la AT 019/23 en la que señala que “el escenario de riesgo al que se enfrentan personas que se dedican a la defensa de los derechos humanos y el liderazgo social de manera individual o colectiva desde diversos ámbitos o sectores del país”.
Por otra parte, puntualizó Indepaz que la imposición de normas y otras formas de control social por parte de los grupos armados significan un permanente riesgo de violación a los derechos de la población.
Entre los grupos que operan en la zona, el organismo colombiano indica que se encuentran el Frente Carolina Ramírez del Bloque Sur Oriental del Estado Mayor Central (FARC-EP), Comandos Bolivarianos de la Frontera- Segunda Marquetalia (también disidencia de las FARC-EP), bandas de carácter local y la Sexta División del Ejército colombiano.
Fuente Telesur