
“Los ojos se pueden afectar por cualquier enfermedad que padezca la persona”
El director de la Fundación Nacional de Ciencias Visuales asegura que cualquier enfermedad vascular inflamatoria puede provocar ceguera
El oftalmólogo Remberto Escoto advirtió que hay muchos infartos oculares en el país, pero es imposible cuantificarlos porque hay algunos que tienen efectos asintomáticos, y alerta que la hipertensión, la diabetes y la artritis reumatoidea no controladas pueden producir una ceguera total.
Entrevistado por el periodista Federico Méndez, en el programa Esferas de Poder, que se transmite los domingos de 8:00 a 9:00 de la mañana, por RNN Canal 27, define la diabetes como la reina de los infartos oculares.

“Hay algunos que son asintomáticos, la persona puede tener un infarto (ocular) y si no afectó el centro de la mirada, la persona no lo nota. Eso sería un hallazgo en una revisión rutinaria que se haga”, precisó.
El especialista considera que cualquier enfermedad vascular inflamatoria, por ejemplo, el lupus, puede provocar una ceguera total.
Asimismo, recalca que también cualquier enfermedad que afecte los vasos sanguíneos, ya sea obstructiva o inflamatoria, puede provocar grandes afecciones en el ojo y conducir a la ceguera.
“Lógicamente, todo eso se puede controlar, se puede diagnosticar, se puede tratar para que no se llegue hasta allá. Pero el concepto es que los ojos se pueden afectar por cualquier enfermedad que padezca la persona”, adujo.
Escoto planteó que la tuberculosis provoca problemas en la visión, como uveítis que es una inflamación de una capa intermedia del ojo.
El director de la Organización Nacional de Ciegos Dominicanos y la Fundación Nacional de Ciencias Visuales dijo que concretamente, hay una edad, que son los 40 años, puede ser un poquito antes o después, donde la persona ya empieza a tener dificultades para leer.
“Si, por ejemplo, a los cuarenta necesitamos cero cincuenta (en los lentes) un número para poder leer bien, a los sesenta necesitamos tres dioptrías”, añadió.
Escoto dijo que a partir de los 65 años empiezan los padecimientos de catarata, que es otra condición en el ojo donde la refracción cambia.

“O sea, que a lo largo de la vida nuestra refracción puede ir variando, se estabiliza durante muchos años, aparece la presbicia, que es lo normal, y luego aparece la catarata, que también es normal”, agregó.
El director de la Unidad de Oftalmología del Centros de Diagnósticos y Medicina Avanzada y de Conferencias Médicas y Telemedicina (CEDIMAT) sostiene que el polvo del Sahara afecta la vista produciendo lagrimeos y picor en los ojos, lo cual puede ser mitigado con una gotita para producir una lubricación.
Comentó que la principal causa de consulta en un centro de oftalmología o a un hospital donde hay ese servicio de oftalmología, son de pacientes que procuran espejuelos para mejorar la visión.
El galeno sostuvo que la primavera es la época del año donde hay más problemas de superficie ocular por la gran cantidad de alérgenos en el ambiente que provocan algún tipo de alergia ocular.