Una oleada de ataques rusos con drones y misiles, la más masiva de los últimos meses, ha causado daños y heridos en diversos puntos de Ucrania, incluida la capital Kiev y núcleos como Leópolis (oeste) y Odesa (sur).
El alcalde de Kiev anunció que tres civiles permanecen en estos momentos enterrados bajo los escombros de un almacén en el que han impactado fragmentos de un proyectil, mientras que otras tres personas han sido rescatadas.
Ucrania busca potenciar su producción de armas mientras Rusia fortalece su industria militar
Ucrania se centra en el incremento de la producción de armas para responder a los ataques de Rusia, en medio de la incertidumbre sobre el futuro de la ayuda de Occidente y el creciente potencial bélico ruso, que ha logrado acelerar su industria militar pese a las sanciones.
Los esfuerzos de Kiev en potenciar su industria militar tienen lugar en medio de una reducción considerable de la ayuda militar de Occidente, atascada por la lucha política interna entre demócratas y republicanos en Estados Unidos y el bloqueo de Hungría al plan de apoyo de la UE. Pese a ello, el Gobierno de EE.UU. anunció un nuevo envío de 250 millones de dólares (225 millones de euros) en armamento para Ucrania, muy inferior a los 61 000 millones pedidos por la Casa Blanca al Congreso.
Rusia refuerza su potencial bélico
En tanto, Rusia continúa fortaleciendo su industria militar, según informó al presidente ruso, Vladímir Putin, el director general de la corporación estatal rusa Rostec, Serguéi Chémezov. «Incrementamos en 50 veces la producción de municiones para armas ligeras y para sistemas de lanzaderas múltiples», declaró, al señalar que la corporación aumentó en 5.5 veces la producción de transportes blindados y en siete veces la producción de tanques de guerra. Según el director de Rostec, uno de los mayores productores mundiales de armas, aviones, helicópteros y otros equipamientos, «se trata de un incremento global».
Pulso en el frente sur
El estadounidense Instituto de Estudios para la Guerra (ISW) reconoció, en su informe más reciente, que las fuerzas rusas «avanzaron en el oeste de la región de Zaporiyia (sur) y retomaron posiciones que las fuerzas ucranianas habían capturado durante la contraofensiva del verano de 2023″, según imágenes geolocalizadas. De acuerdo con el ISW, las fuerzas ucranianas se replegaron a «posiciones más defendibles cerca de Robotine para pasar el invierno».
El centro de estudios estadounidense señaló que los recientes avances rusos en este sector del frente muestran que «la actual guerra posicional en Ucrania no es un punto muerto estable«, ya que la balanza podría inclinarse a favor de cualquiera de los dos bandos en dependencia de las decisiones tomadas por Rusia u Occidente.
«Los limitados avances rusos podrían volverse significativos, especialmente si Occidente corta la ayuda militar a Ucrania», advirtió.
Fuente Euronews