Varias zonas de Gaza han alcanzado el nivel más alto, el de «catástrofe«, en el baremo de Naciones Unidas sobre inseguridad alimentaria, por la hambruna en el norte y sur de la Franja palestina. La ONU, gobiernos y organizaciones no gubernamentales, como Acción contra el Hambre, elaboran este baremo en el que el enclave palestino llega al máximo nivel en esas zonas tras más de dos meses y medio de ofensiva militar israelí. Según el informe difundido, la población entera de la Franja está sumida en una crisis alimentaria, mientras que 576 600 personas se encuentran en niveles de hambre «catastróficos».
«La falta de alimentos es tan extrema que uno de cada cuatro hogares en Gaza sufre inanición, tasas alarmantemente altas de desnutrición aguda entre los niños más pequeños y un exceso significativo de mortalidad», advirtió Acción contra el Hambre.
La mayoría de las organizaciones humanitarias han reducido sus operaciones al mínimo en Gaza tras reanudarse los ataques después de la tregua de noviembre, según un comunicado de esta ONG que trabaja en el enclave. Muchos de los cerca de 1.9 millones de gazatíes desplazados, el 85 % de su población, se refugian en el sur, en lugares como Rafah, donde ni en las designadas por Israel como zonas humanitarias han escapado de los bombardeos.
La organización Human Rights Watch también acusó esta semana a Israel de usar el hambre y la sed como arma de guerra en su ofensiva dentro de la Franja de Gaza.
OMS: «Se acaban los calificativos para describir la catastrófica situación sanitaria en Gaza»
La Organización Mundial de la Salud (OMS) se sumó a las denuncias, al expresar que la situación de los hospitales y otros centros sanitarios en Gaza es «catastrófica«, sin ningún hospital operativo en el norte de la Franja y solo 9 de 36 en todo el territorio todavía en funcionamiento, pese a los 246 ataques contra instalaciones de salud.
«Nuestro personal se está quedando sin palabras para describir la catastrófica situación que enfrentan nuestros pacientes y trabajadores sanitarios», indicó en rueda de prensa telemática el representante de la OMS en los Territorios Palestinos Ocupados, Richard Peeperkorn.
Mientras tanto, el Ejército de Israel afirmó haber atacado unos 230 objetivos de Hamás en lugares de Gaza como Jan Yunis y Yabalia, donde las fuerzas israelíes libran intensos combates al considerarlos bastiones del grupo islamista en la Franja palestina.
La fuerza aérea israelí destruyó en Jan Yunis, en el sur de Gaza, un edificio utilizado por Hamás y un lanzador de proyectiles hacia Israel, según un comunicado del Ejército. Además, mató a supuestos miembros del grupo islamista en el campo de refugiados de Al Shati, en el norte del enclave costero.
Asimismo, las tropas terrestres encontraron numerosas armas en una escuela en Yabalia, en el norte de Gaza, de acuerdo al Ejército israelí, que de forma recurrente asegura que Hamás utiliza centros educativos, hospitales y otras instalaciones civiles para esconderse, guardar armamento y atacar a sus soldados.
Hamás rechaza otro canje de rehenes por presos sin un alto el fuego permanente en Gaza
Por su parte, el grupo islamista Hamás rechazó seguir con las negociaciones en Egipto para un nuevo canje de rehenes israelíes por presos palestinos, si no va acompañado de un alto el fuego permanente en la Franja de Gaza.
«Solo habrá conversaciones para un acuerdo de intercambio de prisioneros después de un cese total de la agresión«, afirmó un portavoz del grupo.
Durante las negociaciones que se retomaron en El Cairo, el grupo islamista declinó hasta tres ofertas puestas sobre la mesa por los mediadores -Catar, Egipto y EEUU-, según confirmaron fuentes de Hamás. De acuerdo con las mismas fuentes, Israel ofrecía como máximo dos semanas de tregua para el canje de secuestrados por prisioneros palestinos; pero Hamás exige un cese de las hostilidades y la retirada de las tropas israelíes del enclave.
La Franja de Gaza está sumida en su mayor crisis humanitaria, con más de 20 000 muertos (8000 de ellos niños) y 52 600 heridos a causa de los ataques israelíes, según las autoridades gazatíes, además de 7500 cuerpos que se calcula que están bajo los escombros. Israel declaró la guerra a Hamás el pasado día 7 de octubre, a raíz de los ataques del brazo armado del grupo islamista en suelo israelí, que causaron más de 1200 muertos y 240 secuestrados.
Fuente Euronews