
De 2020 a 2024 el Ministerio de Agricultura ha asignado RD$1729 millones
El cultivo de arroz se lleva a cabo en dos ciclos. Uno es en primavera, entre diciembre y abril, y representa el 55% de la producción nacional, mientras que la otra es la de invierno que comprende los meses de octubre y noviembre. Esto significa que la producción se obtiene en un período corto, mientras que el consumo del cereal, que es en promedio de 14 372 292 quintales al año, se mantiene casi igual todo el año.
Por eso nace el Programa Nacional de Pignoración, que consiste en un sistema donde se almacena el arroz en épocas de cosecha para comercializar en la cantidad que el mercado lo requiera cada mes para no desestabilizar el precio. El Gobierno les presta dinero a los molineros por adelantado para que les compren inmediatamente a los productores sus cosechas. Conforme se vende el arroz durante el año, le pagan al Estado a través de la banca con una tasa de interés baja.

Entre 2020 y lo que va de 2024 el Ministerio de Agricultura erogó RD$1729 millones para el almacenamiento, pago de intereses y el seguro agropecuario del programa. En total, han sido en promedio RD$406 millones al año, exceptuando al 2024, cuyo monto, de acuerdo con los datos disponibles hasta la fecha, asciende a los RD$101 millones.
Por su parte, el Banco de Reservas (Banreservas) destinó una partida de RD$6000 millones en financiamiento, a una tasa preferencial de 7.5%. Para la cosecha 2023-2024 la entidad bancaria dispuso RD$10 000 millones con una tasa de un 6%.

A través de Agricultura este programa, además, entregó en 2022 y 2023 cheques por RD$66 millones y RD$50 millones para incentivar la siembra de semillas certificadas de arroz que pueden aumentar la productividad entre un 25% y 30%.
¿Quién se beneficia?
Según Juan Tomás Camilo, director de la Unidad Ejecutora de Pignoración (UEPI), todos los productores de arroz, que según el último censo agropecuario se estima en unos 30 300, se benefician de este sistema, ya que, aunque haya un excedente de producción, venderá el producto al precio establecido por la Comisión Nacional Arrocera (CONA).
“El Estado aporta un fondo a través de la Dirección General de Presupuesto, que se destina al pago de intereses que toman los molineros para comprar el arroz en el campo, pagarle a tiempo a los productores y para ponerle un seguro al arroz que está almacenado”, explicó.

Añadió que no solo es beneficioso para los agricultores, sino también para los molineros, que cuentan con la materia prima para sostener sus marcas en el mercado y para los consumidores que recibirán el producto a un precio estable todo el año. Respecto a la banca, señaló que no siempre se gana, porque la tasa actual de los préstamos de pignoración es de 6% anual, cuando las tasas en los bancos son de entre 14% y 18%. Sin embargo, existe una labor social, ya que a pesar de que “no ganen mucho” colaboran con el abasto de los alimentos.
El presidente de la Federación Nacional Dominicana de Productores de Arroz (Fenarroz), Marcelo Reyes, afirmó que la pignoración es el principal pilar que sostiene la estabilidad del sector arrocero nacional, interviniendo en las leyes del mercado de la oferta y la demanda, garantizando estabilidad de precios tanto para el productor como para el consumidor. “Es una operación donde todos ganamos: Estado, consumidor, industria y productor”, expresó.
Indicó que esta inversión logra la estabilidad y el desarrollo sostenible de la producción y es justificable, dada la importancia que tiene para la vida nacional. Insistió en que es un producto “prácticamente indispensable e insustituible” en la dieta diaria de la población dominicana, y, por otro lado, es una actividad agroindustrial de un valor significativo para la economía del país por sus aportes a la generación de empleos, al ahorro de divisas y al nivel de inversión en el campo.
Objetivo del Programa Nacional de Pignoración
El 2 de junio del 2005 se crea la Unidad Ejecutora de Pignoraciones (UEPI) mediante resolución 31-05 del Ministerio de Agricultura para administrar el Programa Nacional de Pignoración de Arroz en primera instancia y luego a otros rubros de la canasta básica alimentaria del país, como la habichuela, ajo, cebolla, papa, huevo, pollo y leche.
El propósito fundamental es garantizar la estabilidad y niveles aceptables de rentabilidad para los participantes en los sectores agrícolas mediante la regulación equitativa de la producción, el procesamiento, la comercialización y el consumo de los rubros. Juan Tomás Camilo, director de la UEPI, dijo que también tuvieron experiencia con la carne de cerdo cuando estos animales fueron atacados con la peste porcina.
“Con el temor de que tuviéramos escasez, guardamos carne sana, lo que nos permitió convertirla en salami de buena calidad para la población dominicana”, dijo. Señaló, además, que se está ejecutando un proyecto que tiene como objetivo pignorar 10 millones de libras de pollo, debido al exceso de producción.
Fuente El Dinero