
Un documental revela una operación de la Resistencia palestina para infiltrarse en los servicios de seguridad y espionaje de Israel y obtener informaciones secretas.
El documental ‘Telaraña 2’, detalla una compleja operación de espionaje llevada a cabo por las Brigadas Al-Quds, rama militar del movimiento de la Yihad Islámica Palestina, en el servicio de seguridad interna israelí, Shin Bet, y el servicio de espionaje de Israel, el Mossad.
La misión secreta fue parte de la contraofensiva de la Yihad Islámica, llamada Wahda al-Sahat (Unidad de los Campos), contra el régimen israelí que lanzó en agosto de 2022 una sangrienta campaña de bombardeos a la Franja de Gaza. En tal ofensiva, el ejército israelí disparó cerca de 150 ataques aéreos contra el sitiado territorio palestino, al que la Yihad Islámica respondió disparando unos 1100 cohetes hacia el enemigo.
En total seis combatientes palestinos participaron en operativo de espionaje y lograron infiltrarse en el mecanismo de gestión de reclutamiento y espionaje del aparato de inteligencia israelí. Los espías palestinos lograron obtener informaciones secretas y valiosas de varios oficiales israelíes.
En uno de los operativos, conocido como Recluta #106, un combatiente palestino engañó a un oficial del Shin Bet haciéndole creer que tenía miedo de ser arrestado por la resistencia palestina, lo que atrajo al oficial israelí para que revelara un tesoro de información sobre el sistema de seguridad del régimen, métodos y herramientas.
Esta compleja operación de espionaje palestina condujo al arresto de varios espías israelíes y al desmantelamiento de al menos tres redes de espionaje israelíes.
Gracias a esta operación, detalla el documental, la Yihad Islámica logró acabar con “la leyenda de invencibilidad” del ejército israelí. El operativo también constituyó un duro revés para dos importantes agencias de Israel, el Shin Bet y el Mossad.
Palestina aboga por volverse más hacia China

El canciller palestino censura el silencio de EEUU ante las agresiones de Israel a palestinos y dice que Ramalá opta por estrechar su alianza con China.
Riad al-Maliki ha criticado, durante una rueda de prensa con medios extranjeros, la falta de voluntad del actual Gobierno de Estados Unidos, presidido por Joe Biden, para resolver el conflicto palestino-israelí. «La Administración de Biden ha sido una decepción», ha dicho.
“Han pasado tres años desde las promesas del presidente Biden, pero no hemos visto nada más que apoyo financiero a la Agencia de Obras Públicas y Socorro de las Naciones Unidas para los Refugiados de Palestina [UNRWA] y los hospitales» en Al-Quds (Jerusalén), ha criticado.
Al-Maliki ha expresado la frustración de los palestinos con la posición de EEUU «sobre las hostilidades y crímenes de Israel, incluidos sus recientes ataques brutales en la ciudad de Yenín en el norte de Cisjordania», que dejaron una docena de muertos y más de 140 heridos.
Ante tal circunstancia, el jefe de la Diplomacia palestino ha dicho que Palestina ha optado por afianzar lazos con Pekín, y “se está volviendo más hacia China, que apoya su plena membresía en las Naciones Unidas”.
“China no solo busca aumentar su presencia económica sino también su presencia política en Asia Occidental. Muchos países del mundo quieren el apoyo de China, ya que ésta se ha convertido en un actor global importante”, ha detallado.
Palestina rechaza mediación de EEUU y aboga por el rol de China
“No hay un proceso de paz en Asia Occidental. Si hay uno en el futuro, ¿por qué China no debería participar junto con otros países?”, ha preguntado, lamentando que Washington no haya dado paso alguno para reanudar las negociaciones palestino-israelíes, estancadas desde 2014 debido, entre otros, a «la continuación de la expansión de las colonias ilegales por parte de Israel en Cisjordania y Al-Quds».
Los palestinos acusan a Estados Unidos de ponerse del lado de Israel y de ser parcial en el estancado proceso de paz. Además, creen que Washington «con su silencio ante las violaciones israelíes da un cheque en blanco al régimen israelí para continuar la matanza, expansionismo, y agresiones contra palestinos».
China, al contrario de EEUU, ha apoyado con firmeza la causa del pueblo palestino y respaldado el derecho de esta nación a tener un Estado independiente.
Pekín y Ramalá acordaron en junio elevar el nivel de sus relaciones diplomáticas a la categoría de “asociación estratégica”, durante una reunión entre sus presidentes, Xi Jinping y Mahmud Abás, en Pekín.
El acercamiento de China a los países de Asia Occidental y el rol clave que está jugando, cada vez más, el gigante asiático en los procesos de paz en la zona es obvio para todos, incluidos EEUU.
Fuente HispanTV