
Tras resistir ataques durante el alto el fuego de tres días declarado por Rusia el pasado fin de semana, algunos soldados ucranianos cerca del frente tienen un mensaje claro para el presidente Volodímir Zelenski: no debe haber negociaciones con Moscú hasta que las tropas rusas se retiren completamente del territorio ucraniano.
«Como soldado y ciudadano de Ucrania, creo que antes de sentarnos a la mesa de negociaciones deberíamos volver a las fronteras de 1991» el comandante de una unidad de drones de la Guardia Nacional, identificado como Chepa.
Desde un búnker cerca de la línea de combate, Chepa sostiene que la retirada total es el único punto de partida aceptable para cualquier conversación: «Eso es todo. Retirada total de todas las tropas del territorio de Ucrania. Luego, cuando podamos hablar. Lo que sea que él (Putin) esté pensando, tomar ciertas regiones o dividir territorios, nadie le ha dado el derecho de hacerlo«.
Los comentarios de Chepa reflejan el sentir de otros miembros de su unidad, que denuncian que, durante el supuesto alto el fuego, continuaron recibiendo fuego enemigo constante. «No hemos visto ningún alto el fuego, hubo continuos ataques con obuses, lanzacohetes, lo usaron todo. No hemos experimentado ningún alto el fuego», afirma.
Posibles negociaciones en Estambul
Poco más de una hora después del final del cese de hostilidades, el presidente ruso, Vladímir Putin, propuso nuevas conversaciones con Ucrania, basadas en el borrador de un acuerdo de 2022 que incluiría la neutralidad permanente de Kiev. Esta exigencia contraviene directamente la Constitución ucraniana, que desde 2019 establece como objetivo la plena adhesión a la OTAN.
Zelenski no ha cerrado la puerta al diálogo, pero ha reiterado que cualquier conversación solo será posible tras un alto el fuego incondicional, respaldado el sábado por líderes de Reino Unido, Francia, Alemania y Polonia.
Chepa, por su parte, no descarta las negociaciones, pero mantiene su escepticismo: «Sí, necesitamos negociaciones. Pero él (Putin) tiene miedo de las conversaciones». Mientras observa con sus drones nuevos movimientos rusos cerca del frente, ve que «hay mucho movimiento de vehículos militares y civiles». «Es interesante que tan cerca de la línea de contacto haya un coche civil. No está dañado, eso sí. Deben estar haciendo un buen uso de ella», concluye.
Fuente HuffPost