El Ministerio de Trabajo homologó un acuerdo que permite a Coto, Carrefour y las grandes cadenas a suspender a su personal por “falta o disminución de trabajo”. Podrán pagar el 50% del sueldo. Retoma el pacto firmado en pandemia, en situaciones excepcionales, pero ahora las podrán aplicar cuando quieran. Otra entrega de la cúpula sindical peronista.
La última semana, los diarios difundieron la paritaria de Comercio y las negociaciones de precios del Gobierno con las grandes empresas. Lo que nadie contó es que al mismo tiempo estaban cocinando la entrega de derechos de las trabajadoras y trabajadores mercantiles.
En los últimos días se publicó en el boletín oficial el acuerdo entre la Federación Argentina de Empleados de Comercio y la cámara supermercadista. La Resolución 1873/2023 autoriza a que las empresas realicen “suspensiones para el personal y el pago de una prestación no remunerativa en los términos del Artículo 223 bis”. O sea “por razones de fuerza mayor o disminución de trabajo”. Podrá ser por 60 días (o hasta que persistan los motivos) y solo tendrán que abonar el 50% del salario.
No es una medida nueva. En realidad reflotan el pacto sellado durante la pandemia, una situación excepcional, pero ahora aplicada a las situaciones que le vengan a gana a Don Coto y compañía.
Si faltan algunas mercaderías, pueden suspender repositores o personal de depósito.
Si hay escasez de ventas, pueden suspender cajeras.
Si hay escasez de productos, pueden suspender al sector de logística.
Si hay baja el consumo por una alta inflación, pueden suspender masivamente.
La medida se convierte en un arma en mano de las patronales, que pueden utilizarla para chantajear en medio de los acuerdos de precios y ventas. Así como remarcan o esconden mercadería, ahora también pueden suspender empleados.
Recordemos que la medida dictada por el Gobierno nacional en 2020 impedía, en general, las suspensiones pero permitía hacerlas bajo el paraguas del artículo 223 bis y en acuerdos por sector. Las empresas podían suspender y pagar una suma no remunerativa, que además deja de lado muchas sumas que componen el salario de bolsillo.
Como en otras ocasiones, el comercio se convierte en un “globo de ensayo” para atacar derechos laborales.
Como parte de la campaña “Massa 2023”, Cavalieri le muestra a los grandes empresarios la disposición de las cúpulas sindicales peronista a que la clase trabajadora haga “otro esfuerzo” para que sus negocios salgan adelante.
Fuente La Izquierda Diario