
Por : Jesús Sosa.
La dignidad y el orgullo son dos vocablos que encierran significados diferentes, aunque algunos lo confunden; principalmente aquellos que le gustan las lisonjas, senirtse poderosos y aclamados en función de un cargo que es efímero en el tiempo.
Sentí vergüenza ajena cuando vi en una ocasión que un enlace se acercó al vehículo de un funcionario quien subió el cristal y el chófer guallo las gomas saliendo como un sepelin, haciendo saltar al enlace; al observar el incidente a manera de solidaridad le dije : Compañero y hermano bueno que le pase éso por lambon y plagoso, ése venía al partido deguabinao, con un saco sin color y debembao, el cuello de la camisa rullida…. parecía una hoja seca arrastrada por el viento,
Sino te cogen las llamadas y no te escriben.
La obra se llama: YO no tengo quien me llame, ni quien me escriba.
El título es parecido a la obra de Gabriel Garcia Marquez: El Coronel no tiene quien le escriba.
La suerte de ahora es que aunque no te llamen, te salgan corriendo para que tú no le digas compañero estoy fuera, aunque te ignoren mirándote por de bajo, te pasen por el lado con altivez y el pecho parado; tienes la oportunidad de ver a aquel que no te llama, ni te escribe, en televisión y en las redes sociales.
Puedes aguajear y hacer bultos diciendo: ustedes ven ése que está ahí nos reuníamos juntos y viajamos juntos.
No digan más de ahí, porque si dicen que el trabajo lo hacían en su vehículo y que usted costeaba los gastos, eso está muy mal, porque usted no debe sacaliñar, recuerde que, lo que una mano hace, no lo puede saber la otra, algo difícil porque son hermanas y siempre andan juntas, pero bueno….
Cuanto lo ve en algún medio te sirve para recordar y cantar la canción : Cuando estábamos juntos.
Ésos mismos que ayer te alababan, hoy no te miran, ni te dan ni la hora de un simple reloj. Así es, muy parecida ésa frase que pertenece a la canción éxito de Luisito Rey.
En el caso que nos ocupa el éxito es de tod@s, aunque no esté bien repartido; podríamos decir la ley del embudo, lo ancho para algunos y lo estrecho para uno.
Como dice la canción de Mercedes Sosa : EL TIEMPO PASA Y NOS PONEMOS VIEJOS.
A propósito de viejos, he escuchado a varios viejos decir: hay que darle la oportunidad a los jóvenes…pero Ellos siendo viejos no renuncian para colocar a un joven.
Finalmente un consejo:
Compañer@s las reuniones políticas, las iglesias y las funerarias no son los escenarios adecuados para pedir empleos, cuando algunos de ésos funcionarios tienen que ir a una actividad de ésas, su mayor preocupación es tener que verle la cara a los compañeros que se le tiran encima como hormigas detrás de una migaja de pan.
No es cuestión de orgullo, recuerde que usted es un dirigente con experiencias políticas y profesional; debe tener carácter, dignidad y ser respetado.
El hecho de que algunos ocupen una posición de relevancia, no significa necesariamente que hayan aportado más que usted a la causa o que tengan más experiencias, méritos y gerencia que usted; pero siempre debe respetar las investidura y si usted no tiene investidura, lo mínimo que a usted le corresponde es el respeto como persona, cómo dirigente y como profesional.
Debemos seguir haciendo el trabajo político porque el país nos necesita y no podemos permitir el regreso de una corrupción sin límites.
Dios siga derramando bendiciones para todos, junto a sus familiares y amigos.
La conciencia humana es algo que todavía está en estudio, ya que la ciencia no ha podido descifrar el enigma más grande y complejo existente que es el cerebro humano.
Lo que sí podemos asegurar es que los animales que llamamos irracionales e inferiores tienen una mejor convivencia social entre sus especies.
Nada es para siempre; pero si lo cuidamos dura un poco más.
Jesús Sosa.
Profesor, Sicologo Clínico, Abogado.