
400 trabajadores de la salud mantienen la toma en la clínica del barrio de Colegiales, alertando el vaciamiento de la empresa, el incumplimiento de los sueldos y despidos. Recién cobraron un porcentaje de su sueldo de octubre. La clínica funciona con escasez de insumos y el vaciamiento de recursos por parte de la patronal. Desde hace un año y medio sanatorio pertenece al Sindicato Único de Trabajadores de Edificios de Renta y Horizontal (SUTERH) de Víctor Santa María.
«Yo pensaba que al cambiar la patronal y tener a Santamaría, que es un sindicalista, nuestra situación iba a mejorar pero pasó todo lo contrario», comentó un empleado en la puerta del establecimiento.
Desde 2016 que las y los trabajadores vienen sufriendo irregularidades en el pago de sus salarios, pero la situación empeoró, cuando en 2021 fue adquirida OSPERYH, la obra social que depende del SUTERH, el sindicato de encargados de edificio conducido por Víctor Santa María, presidente del PJ porteño, dueño de Página 12 y del Grupo Octubre y miembro de la CGT.

Las respuestas de las autoridades son nulas, pero las señales de vaciamiento y despidos son claras: se están llevando los insumos. En ese sentido la toma intenta hacer frente al intento de vaciamiento y defender los 400 puestos de trabajo, con el cobre pertinente de sus salarios.
Actualmente los trabajadores se encuentran bajo el Convenio Colectivo de Sanidad vigente (120/75). Hay rumores sobre el intento de vaciar la empresa para después contratar trabajadores fuera de convenio o con un convenio de menor salario o conquistas laborales.

Un viejo conocido
Pese a la sorpresa de los trabajadores, en la prensa el prontuario de Víctor Santa María como patronal es mas que conocido. En numerosas situaciones, trabajadores de prensa enfrentaron despidos o maltrato gremial por parte del Grupo Octubre.
Principalmente en Página 12, sus trabajadores vienen realizando una lucha desde hace años por la precariedad en sus contratos y los bajos salarios. El accionar de una patronal que se muestra como próspera comprando activos de otras empresas, lejos de acceder a sus reclamos, es con medidas anti gremiales.

Fuente ANRed