Los estudiantes de la Universidad de Brown acordaron poner fin a su campamento en el campus después de que la Administración se comprometiera a votar sobre la desinversión en empresas afiliadas a Israel, todo ello tras días de protestas por el apoyo indirecto de ese campus a la guerra en Gaza.
De esta manera, los organizadores acordaron desmantelar el campamento de Main Green y abstenerse de organizar protestas no autorizadas hasta finales del mes de mayo.
Los estudiantes exigían a la universidad que se deshaga de empresas vinculadas al Gobierno israelí y que desestime los cargos contra los 41 de sus compañeros arrestados durante una sentada en el University Hall el pasado 11 de diciembre. Los cargos contra estos estudiantes no han sido retirados.
La medida marca la primera concesión significativa por parte de una destacada universidad estadounidense tras un movimiento estudiantil generalizado que comenzó el 18 de abril denunciando la guerra en Gaza y rechazando las inversiones de sus universidades en empresas que apoyan a Israel, así como el apoyo de su Gobierno.
Desde entonces, el impulso del movimiento estudiantil en apoyo a Palestina en Estados Unidos se ha extendido a universidades de Francia, el Reino Unido, Alemania y Australia.
De hecho, en una declaración, la presidenta de Brown, Christina Paxson, anunció: “La devastación y la pérdida de vidas en el Medio Oriente han llevado a muchos a pedir un cambio significativo, al tiempo que plantean cuestiones reales sobre la mejor manera de lograrlo”.
“Brown siempre se ha enorgullecido de resolver diferencias mediante el diálogo, el debate y escuchándose unos a otros. No puedo tolerar el campamento, que violó las políticas de la Universidad”, apuntó.
Además, como parte del acuerdo, la universidad se ha comprometido a no expulsar ni suspender a estudiantes o miembros del personal docente en función de su participación conocida en este momento.
El acuerdo dice: “Ningún miembro de la comunidad de Brown, incluidos profesores, personal, estudiantes de posgrado, estudiantes universitarios o exalumnos, que haya estado involucrado en el campamento o actividad relacionada enfrentará represalias por parte de la Universidad, incluida la terminación de su empleo o la reducción de su empleo. en compensación.”
La Brown Divest Coalition dijo en un comunicado: “Esta es una victoria sin precedentes que se produce cuatro años después de que el Comité Asesor sobre Responsabilidad Corporativa en las Políticas de Inversión hiciera una recomendación de desinversión en 2020”.
“En ese momento, y en los años posteriores –incluidos los primeros días del campamento– la presidenta Christina Paxson se había negado a llevar el informe ACCRIP a la corporación para su votación. Esta votación es una concesión importante que afirma el poder de nuestro campamento y del movimiento nacional de campamentos estudiantiles por Palestina”.
Fuente TeleSUR