Por Juan Tatis
Mi carta de Renuncia al PLD
A Danilo Medina Sánchez: Presidente ilegítimo del PLD
Al Presidente Municipal de Santiago Lic. José Arturo Tatis.
Mediante la presente comunicación política hago formal y definitiva Renuncia a mi condición de presidente del histórico Comité Intermedio Hipólito Peña B y a la categoría más alta, la de miembro de esa organización política, tal como lo definiera El Maestro Juan Bosch y que lamentablemente un grupo de encumbrados dirigentes, a costa del trabajo de miles de hombres y mujeres dignos construimos un partido para liberar a la República Dominicana del subdesarrollo y a la postre, la ambición y el sectarismo, termina echando por tierra, la obra política maestra del prócer vegano.
Estuve en cada escenario, casi desde la formación misma del partido, soy testigo de los avances importantes y las transformaciones que experimentó el pueblo dominicano con los gobiernos del PLD, sin embargo, también puedo dar testimonio de la promesa peregrina de redimir a las bases del PLD, pues sólo en las visitas sorpresas estaba terminantemente prohibido que asistieran los compañeros del partido en la zona en la que se efectuaban, porque el empeño era de usted aparecer como el único artífice del gobierno y del partido.
Por tanto no toleraré que se repita la historia de darle más valor a las preciosas de Dios que a las nobles jóvenes y mujeres que si conocen el trabajo constante en la fila partidaria
Con usted, las bases del PLD pueden afirmar que: “araron en el Mar y sembraron en el viento”, como expresó el libertador de las Américas, al desvanecerse los esfuerzos patrióticos de tantos hombres y mujeres que creyeron en la quimera de la revolución política.
Usted deja como legado imperecedero una mancha indeleble a la bella historia de la Democracia Dominicana, por dos razones fundamentales, la primera fue auspiciar la división y la salida del poder del PLD y la otra razón me la reservo por ahora…. para dirimirla en el escenario que elijan los ex compañeros antidemocráticos, excluyentes, engreídos y perversos de la cúpula partidaria.
Mi renuncia no implica abandonar mis derechos sobre los activos patrimoniales del PLD, pues los mismos son el resultado del esfuerzo de todos los que en algún momento formamos parte de esa organización y me reservo el derecho de accionar en los tribunales en nombre de todos los renunciantes que en su momento me otorguen el poder de representación correspondiente.
Paso en lo adelante junto al César de la Política Dominicana a demostrar con el favor del altísimo que siempre es posible construir nuevos sueños, esperanzas y otras aventuras progresistas y democráticas, tal como lo hicieron los gigantes de la historia: Juan Bosch, Lula, Lincoln, Fidel, Máximo Gómez y Nelson Mandela.
Siempre confrontando con la verdad histórica