
Registra «ligeras mejorías, en un marco que para los médicos sigue siendo complejo»
Lenta, pero sin pausa. Así parece ser la fase en la que se encuentra el Papa Francisco, después de que no se hayan producido incidencias en su paulatina recuperación de la neumonía bilateral que le tiene internado en el Policlínico Gemelli de Roma desde hace veintisiete días. Lo confirmaron este martes fuentes vaticanas: “La situación permanece estable”. Eso sí, con «ligeras mejorías, en un marco que para los médicos sigue siendo complejo».
Si el pasado lunes los médicos decidieron levantar el pronóstico reservado y se alejan los días en los que se hablaba de situación crítica, en esta jornada han ratificado que ya no es “inminente” el riesgo de una infección respiratoria. No obstante, el cuadro clínico continúa siendo complejo, por lo que el equipo que le atiende considera oportuno que continúe con el tratamiento y la terapia respiratoria en el Gemelli unos días más.
El Vaticano ha aclarado que «no hay una indicación exacta de cuándo debería salir» y considera «prematuro hacer una evaluación de lo que podría necesitar cuando salga». Por el día, continúa recibiendo altos flujos de oxígeno con cánulas nasales, mientras que de noche usa la ventilación mecánica, con una máscara.
Además de seguir por televisión los ejercicios espirituales de la Curia, que se celebran durante toda esta semana, su estado físico y anímico le permite conversar con las personas que le acompañan en la décima planta del hospital italiano.
Fuentes vaticanas han desmentido además que en la residencia de Francisco en el Vaticano, la Casa Santa Marta, se hayan comenzado obras para levantar una habitación medicalizada, como habían publicado algunos medios
Fuente: La Razón