
El Ministerio de Defensa de Siria ha informado que las FF.AA. sirias han abatido a 20 separatistas del Hayat Tahrir Al-Sham, encabezado por el grupo Frente Al-Nusra (autoproclamado Frente Fath Al-Sham), en los suburbios occidentales de Alepo durante el ataque armado de este grupo a sus posiciones en el distrito de Qobtan al-Yabal.
Según este informe, tras el ataque, estalló un feroz conflicto entre las dos partes y, al mismo tiempo, el Ejército sirio llevó a cabo ataques de artillería contra las líneas de ayuda de estos elementos.
Desde 2011, Siria ha sido testigo de un conflicto sangriento y complejo que ha causado la muerte de más de medio millón de personas, la destrucción masiva de infraestructuras y el desplazamiento de más de la mitad de la población dentro y fuera del país.
Siria denuncia intereses coloniales en detrimento a su reconstrucción
La Cancillería en Damasco condenó «la hostilidad demostrada en la declaración conjunta de Estados Unidos, Francia, Alemania y Reino Unido, quienes insisten en violar los derechos del pueblo levantino y prolongar los efectos de la guerra».

El Ministerio de Asuntos Exteriores y Expatriados de Siria denunció el enfoque hostil mantenido durante los últimos 13 años por los gobiernos de Estados Unidos, Reino Unido, Francia y Alemania, y el uso de todas las herramientas de guerra contra esa nación levantina.
Por medio de un comunicado, la Cancillería condenó el mensaje emitido por esos cuatro países como una muestra más de sus políticas destructivas contra Siria.
De igual modo, consideró la nueva provocación como «una más de sus elaboradas acusaciones y propagandas, destinada a distorsionar la imagen del Estado sirio«.
«Cuando dicen centrar sus esfuerzos en poner fin al sufrimiento de los sirios, es todo hipocresía política y decadencia moral, destinadas a encubrir los efectos desastrosos de las medidas coercitivas ilegales impuestas al pueblo sirio», agregó el texto diplomático.
Según la nota, «el claro y fuerte apoyo de Estados Unidos a una milicia separatista ya causó penurias a los residentes del noreste de Siri, y el robo de su riqueza nacional les trajo privaciones».
Además, «la continuada ocupación de parte del territorio sirio representa una flagrante violación de su soberanía y de la Carta de las Naciones Unidas», recalcó.
La denuncia ministerial subrayó que “el lenguaje de chantaje político utilizado por los autores de la declaración sobre la imposición de condiciones previas al proceso de financiación de la reconstrucción en Siria y el levantamiento de las sanciones, no es más que un lenguaje colonial, cuyo objetivo principal es prolongar la crisis en Siria”.
Washington y esos tres aliados occidentales ratificaron en una declaración conjunta “la falta de normalización con el Estado sirio” y, por tanto, la decisión de no levantar las sanciones contra Damasco.
También reconocieron su injerencia al impedir la reconstrucción del país (sometido a una guerra de desgaste de más de una década y a un fuerte terremoto el año pasado), mientras no lograran una “solución política” ajustada a sus intereses.
Fuente HispanTV