
Después de su discurso de una hora ante el Congreso de EE.UU. –en el que pidió acelerar el envío de armas a Israel para “terminar antes el trabajo”, dijo que los bombardeos sobre Gaza no cesarán “hasta que nuestros seres queridos estén en casa”.
deslegitimó las acusaciones de violaciones del derecho internacional, dijo sin pruebas que los manifestantes propalestinos son “tontos útiles” financiados por Irán y no dio ninguna indicación de su voluntad de alcanzar un alto el fuego.
El primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, ha sido recibido esta tarde con honores en la Casa Blanca, donde mantendrá durante cinco horas dos reuniones de alto nivel: con el presidente, Joe Biden, y con quien podría ocupar su cargo a partir de enero, la vicepresidenta Kamala Harris.
Fuente LA VANGUARDIA