Al menos tres personas han muerto en un ataque ruso con un dron que provocó un incendio en una zona comercial en Odesa, ciudad portuaria a orillas del mar Negro, en el sur de Ucrania.
En un mensaje en Telegram, el gobernador regional, Oleh Kiper, afirmó que las fuerzas de defensa aérea ucranianas habían destruido nueve de los diez drones lanzados durante la noche. Fuentes militares ucranianas dijeron que Rusia lanzó 31 drones contra Ucrania durante la noche y las defensas aéreas destruyeron 23 de ellos.
Ocho heridos en Dnipró
Entre los drones que escaparon de la defensa ucraniana se encuentran los que se estrellaron en la ciudad de Dnipró, hiriendo a ocho personas. Según las autoridades locales, impactaron contra un edificio de nueve plantas y destruyeron varias viviendas. Las operaciones de búsqueda todavía estaban en marcha hoy viernes.
El presidente ucraniano, reunido con representantes extranjeros y organizaciones internacionales, destacó que se deben hacer todos los esfuerzos posibles para poner fin a la guerra este 2024.
Para el presidente de Ucrania, Volodímir Zelenski, la implementación de la Fórmula de Paz podría cumplir una importante tarea humanitaria: traer a casa a los niños ucranianos, así como los adultos cautivos o encarcelados en Rusia.
10 500 civiles han muerto
Según la ONG ucraniana Plataforma Humanitaria, un organismo de coordinación independiente de 78 ONG ucranianas e internacionales que brindan asistencia humanitaria en Ucrania, más de 10 500 civiles han muerto desde el comienzo de la guerra en febrero de 2022, incluidos 587 niños, mientras unos 20 000 han resultado heridos.
Los constantes bombardeos, afirman, están dejando a una «generación traumatizada y desplazada, que teme por su vida».
Fuente Euronews