El Gobierno de Irán negó tener relación con el ataque con aviones no tripulados (drones) en el cual murieron tres soldados estadounidenses instalados en un puesto de avanzada en Jordania, en las cercanías de la frontera con Siria.
La misión permanente de Irán ante las Naciones Unidas (ONU) declaró que la República Islámica no tuvo ningún papel en la operación con drones que también dejó al menos 34 militares estadounidenses heridos.
Autoridades de Estados Unidos (EEUU) y del Reino Unido afirmaron que los autores del ataque son grupos militantes radicales respaldados por Irán que operan en Siria e Irak.
Sin embargo, la misión iraní ante la ONU sostuvo que las fuerzas estadounidenses y los grupos de resistencia mantienen enfrentamientos y los ataques mutuos entre las dos partes son algo recíproco.
El portavoz del Ministerio de Asuntos Exteriores de Irán, Naser Kanani, dijo que es infundada la acusación del Reino Unido de que Irán está involucrado en operaciones de grupos de resistencia en Oriente Medio.
El secretario general de la milicia iraquí Kataeb Sayed al-Shuhada, Abu Ala al-Walai, por su parte lamentó que el Gobierno de Washington condenara el asesinato de tres militares de EEUU en el ataque con drones, pero «ignora al mismo tiempo el genocidio de más de 26 000 civiles palestinos en Gaza por parte de Israel».
Según Al-Walai, unos 100 000 civiles han perdido la vida o resultado heridos desde el inicio del asedio israelí del territorio palestino, muertes que se han cometido con las armas estadounidenses.
Para el funcionario yemení Mohammed Ali al-Houthi, el operativo con drones contra militares estadounidenses es un mensaje claro a la política de Estados Unidos en el mundo árabe.
“El ataque a una base militar en el noreste de Jordania es un mensaje claro sobre el descontento con la política estadounidense en el mundo árabe”, expresó Al-Houthi, miembro del Consejo Político Supremo de Yemen.
Fuente Telesur